Poetas, de cañas

[J. J. Martínez Ferreiro]

Por fin regresa el poeta del fondo de la barras . Pocas veces te vi tan contundente en tu poética, pareces que estás hasta los güe... de cierto tipo de poesía o de poetas con telarañas y anclas en sus pensamientos.

La t´´ecnica propia del relojero; todo estudiado y en su justa medida.

Todo un placer de lectura, querid amigo.

Un fuerte abrazo.

[Pablo Ibáñez]

Rafel,

me ha gustado mucho el poema, amigo. Frescura en la propuesta, variedad en el ritmo, habilidad descriptiva y ambiental. Me gustan esos cambios de ritmo tan tuyos, la pregunta retórica que es inmediatamente respondida:

¿metáforas? ¡Y un cuerno! Solo la mente en vela.

este aire castizo aporta desenfado al tema; como dice Ferreiro, pareces cansado de elevación, de seriedad, y buscas un idioma y unos temas más naturales.

Me ha gustado mucho.
Un gran abrazo, amigo.

[Rosario Martín]

Qué bueno...
Dicen que hay jueves que brillan más que el sol
y dicen bien, compañero.
Un poema brillante, para mi gusto, Rafel,
un placer de lectura.
Ya pasaré con más calma...
Un abrazo

.................................................................
Vaya por Dios, ¡qué cosas me dices!, aunque inmerecidas, gratificantes; te lo agradezco mucho, amiga Rosa, o ¿Rosario?, más porque sé de tus problemas con la vista.
En cuanto al poema, fue una noche de cañas y poesía, me encantan las reuniones de poetas, hablar de nuestras cosas, en fin, ya sabes. Y es que la poesía se puede compartir con tan poca gente...
Abrazos, compañera.

Leí tu poema con el primer café de la mañana
y me tomé uno más para disfrutarlo de nuevo.
Este poema, Rafel,lo percibo más fresco,
más rebelde, más libre y más cercano...
A mí me pareció y me parece
uno de tus mejores trabajos y naturalmente
comparándolo con lo poco que aún he leído de tu obra.
Rosario Martín es mi nombre. lo de Rosa lo puedes quitar
cuando tengas un hueco, me gusta más mi nombre.
Un abrazo, compañero.

[Rafel Calle]

Qué bueno...
Dicen que hay jueves que brillan más que el sol
y dicen bien, compañero.
Un poema brillante, para mi gusto, Rafel,
un placer de lectura.
Ya pasaré con más calma...
Un abrazo

.................................................................
Vaya por Dios, ¡qué cosas me dices!, aunque inmerecidas, gratificantes; te lo agradezco mucho, amiga Rosa, o ¿Rosario?, más porque sé de tus problemas con la vista.
En cuanto al poema, fue una noche de cañas y poesía, me encantan las reuniones de poetas, hablar de nuestras cosas, en fin, ya sabes. Y es que la poesía se puede compartir con tan poca gente...
Abrazos, compañera.

Leí tu poema con el primer café de la mañana
y me tomé uno más para disfrutarlo de nuevo.
Este poema, Rafel,lo percibo más fresco,
más rebelde, más libre y más cercano...
A mí me pareció y me parece
uno de tus mejores trabajos y naturalmente
comparándolo con lo poco que aún he leído de tu obra.
Rosario Martín es mi nombre. lo de Rosa lo puedes quitar
cuando tengas un hueco, me gusta más mi nombre.
Un abrazo, compañero.

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Bueno, en realidad, soy un rebelde, eso sí, cada día menos rebelde, la edad no perdona.
Este poema es una traducción bastante libre de un libro que estoy escribiendo en catalán, probé y algunos giros, no todos, claro está, me parecieron oportunos. La última estrofa no pude arreglarla más y la dejé por imposible o por cansancio.
Ay, los cafés, ya sé que te gustan mucho, yo siempre tomo dos muy mañaneros y soy de los que los saborean, no vale cualquier café.
Ya tienes cambiado tu nombre de usuario: Rosario Martín (la contraseña es la misma, pero la puedes cambiar en tu perfil).
Felices Pascuas, amiga Rosario.
Abrazos.

[Rafel Calle]

Qué bien colocas la puesta a punto, Rafel. Un enjambre de manías alrededor de los poetas duerme y tu sabes y
logras liberarte y liberar el pensamiento. Consientes que la metáfora irradie lealtad y con la lealtad la metáfora
descansa y siente. Bien navega tu barco poético, bajel que atraca en las formas y sentires del poema.

Un abrazo

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Muchas gracias, amigo Guillermo, te agradezco tus continuas atenciones con mis trabajos. En esta ocasión, producto de un ameno e interesante encuentro de escribidores.
Abrazos.

[Rafel Calle]

Implicados en sueños de valor literario,
la nostalgia les vence hacia un tiempo de nudos,
que retoza en el hambre de sus viejos poetas,
fatal inanición, idioma avaro,
verso desnudo,
¿metáforas? ¡Y un cuerno! Solo la mente en vela.

De fría y poco cierta condición,
como un carámbano
prendido en la codicia de un anhelo,
quisieran restaurar el himen
de su ingenio, por tornar a los coitos
que vistan de inocencia su aspecto despeinado.

Saben que vertebrar un pensamiento
significa gastar las provisiones
de un granero indecente
(sentir por escribir o una indecencia).
Son reos del carácter que confisca
la simiente que yerra, la poca densidad
del grano penitente
o el exacto grosor de un cereal empático.

Sus mentes son océanos y marismas veniales,
sin dique que detenga avenidas de ausencia,
ahora huracanados en la barra de un bar.

De proa a popa la cerveza siente
cuanto lloran y ríen las tormentas;
¡ay, los marinos!, en todo naufragio
piensan que siempre se pudo hacer más
o menos, ¿qué más da?
Si una vida es un rango marinero,
también es un faro en la umbría
para el bajel-futuro que atraca en los poemas.[/quote]


A mí me resulta un poema muy interesante. Bien puede ser considerado un metapoema.
Con logradas metáforas el poeta nos trasmite la eterna problemática del poeta frente al estímulo sensorial que, en el contundente remate, lo justifica con cierta piedad, aunque con mucha convicción. El lenguaje utilizado, antes que una alegoría, se expresa en sentido figurado. En la linealidad de la cosa dicha aparece también, en algunos versos, el sentido literal, hecho que facilita la aprehensión del argumento y del mensaje poético. Pero, aún así, el poema tiene su dificultad semántica para el lector. Se me hizo necesario varias lecturas (y necesitaré otras más) para ir descubriendo más riqueza de contenido en este trabajo poético. Creo que el título ejerce un importante papel aclaratorio, determinando el camino de la lectura. Esta estrofa, por ejemplo, siempre teniendo en cuenta el título del poema, se vuelve más clara:

Sus mentes son océanos y marismas veniales,
sin dique que detenga avenidas de ausencia,
ahora huracanados en la barra de un bar.

El cambio que se produce en la mente y en el espíritu de un poeta en la barra de un bar, que bien puede culminar en una revelación.
El poema no es fácil de leer. Hay que tener voluntad de aprehender. Uno la tiene porque el tema es sugerente, enigmático pero racional al mismo tiempo, y llama a la lectura. Diríamos que esto es lo bueno de un poema certero: avivar el interés.

En cuanto a la forma, el ritmo del poema nace de una polimetría imparisílaba premeditada. Todos los versos, a excepción de dos o tres, están perfectamente acentuados en las sílabas pares fundamentales. Los versos son perfectamente identificables: pentasílabos, heptasílabos, eneasílabos, endecasílabos y alejandrinos. Me llamó la atención el hecho de que se regresara a un molde familiar y preceptivo, dejando un tanto de lado el ritmo siempre dificultoso de la multimetría (que no se premedita, pero no puede escapar de los ajustes, de la lima). Así, pues, constatamos una vez más que el ritmo acentual es un recurso seguro con resultados positivos previsibles.

Un abrazo cordial, compañero.
Óscar[/quote]
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Estimado amigo y admirado poeta Óscar:
Este poema a unos les gusta más, a otros menos y a mí me parece propio de un océano o marisma "venial" (de poca importancia y puede ser un pecado literario, pero venial, por ahí me salvo...). Ahora estoy metido en un poemario en catalán, por hacer patria y esas cosas... Si veo que gusta, traduciré algunos poemas escritos en castellano.

Hablando del ritmo, han pasado los tiempos en que procuraba la perfección rítmica, mirando mis poemas de hace muchos años, me encuentro con obras de versos, por ejemplo, exactamente ternarios, cuaternarios... Siempre evitando cualquier antirrítmico, con una precisión milimétrica. Bueno, hace tiempo que tal precisión ha dejado de tener importancia para mí, es más, me gusta la variedad y no me preocupa si hay dos, tres... sílabas tónicas contiguas, aun a veces las pongo adrede. Por otra parte, también me gusta dejar tres, cuatro o cinco átonas, ello conlleva un ritmo trepidante, porque la oralidad busca la tónica (apoyo tónico). En fin, seguiremos comentando asuntos del ritmo en el post que hemos abierto, muy interesante a todas luces.

Y, sí, ya ves que a mí me gusta la combinación de versos con el axis par, no pierdo oportunidad de utilizarla, pero, como es natural, también me gustan otras combinaciones.
Abrazos, compañero.

[Lunamar Solano]

Vibrante frecuencia, cuya cercanía toca la fibra esencial querido amigo... se hace emocionante su recorrido...
Un gusto leerte... disfruto y aprendo...gracias por ello...
Te abrazo con todo mi cariño...
Nancy

[Ramón Carballal]

Un ejercicio poético de muchísima altura. Felicidades y un abrazo.

[Simon Abadia]

Muy buenas imágenes con un mar de intimidades que te sustraen
en fondos y que vuelven a resurgir en lo cotidiano.
Me ha gustado y lo he disfrutado.
Simon

[Armilo Brotón]

¡Bravo por tu propuesta, amigo! Saco varias lecciones de tu poema; unas estrictamente formales y otra significativa: a falta de himen, buenas son unas cervezas.
Un abrazo

[Rafel Calle]

Muchas gracias, amiga Ana, te agradezco el comentario a este poemilla que quiere recordar una conversación entre cañas.
Abrazos.

[Rafel Calle]

Muchas gracias, amigo Luis, te agradezco el comentario y me alegro de que te haya gustado este poema. ¿Bajel? Sí, es posible que tengas razón, quizá lo cambie por barca...
Abrazos.

[Rafel Calle]

Muchas gracias, amigo Simón, te agradezco el comentario y me alegra que te haya gustado este poema.
Abrazos.

[Ignacio Mincholed]

Rafel, me quedo con la visión distendida que flota en tu poema y que tanto bien hace a la poesía. No importa desde dónde se diga, si desde la soledad del bordillo de una acera con las luces de la noche, desde la intimidad de la mesa bajo luz amarilla o desde la atalaya de la barra de un bar con sus luces verdosas entre voces de compañía, del pasado y del presente, goteando la cerveza y el aceite de los pepinillos con anchoas.

Un abrazo.
Ignacio

[Rafel Calle]

Muchas gracias, amiga Salud, te agradezco el comentario y me alegra que te haya gustado el poema.
Abrazos.