Amor de eunuco

[Pablo Ibáñez]

Gracias María José, Carmen, Óscar, Víctor, Javier, Judit, Alejandro, Celia, Ferreiro, Rosa, Ricardo, Raúl, Marisa.

Gracias a todos, amigos.

[Mariano García]

Poco que añadir a lo que ya se ha dicho.
Pablo, enhorabuena, maravilloso trabajo.

Saludos.

[Luna de Nos]

Primer olor a pino en el terrario,
¿me guardas el secreto? que no vengan
doctores a opinarlo.

Se han ido ya dos cosechas del jardín sin que tu mano
aliente la raíz, cubra el esqueje, domestique
el ansia de luz de la hiedra en la baranda.

Germán el aparcero abre la siega;
se acerca con un nido despeinado,
un huevo verdeazul entre las manos:
de torda, me dice, ya es el tiempo --su iris sonriente
aguza luego serio contra el viento, calibrando
la bóveda en arrullo del pinar detrás del río.

Nunca el crujido de pasos tempranos del camino
procura tu pie ahora, sino aquellas
yeguas aurorales
que entonces respiraban de tu tacto
y hoy resoplan minuciosas la niebla y la cancela
--sus lomos humeando al primer sol de noche muerta.

Tu leyenda se desliza al mentidero, cada palabra de ella,
cada idea me urge asentimiento, y ya no puedo
fingir que no es castrante
lidiar con soledad en primavera.

El ansia de luz de la hiedra en la baranda.
La bóveda en arrullo del pinar detrás del río.
Los lomos de las yeguas humeando al primer sol de noche muerta.
Y este amor de eunuco, esta batalla.

Pablo, no sé qué decir primero, si felicitarte por verte ahí arriba - cosa que me place particularmente - o por haber escrito esta maravilla. Un fuerte abrazo, Luna.-

[Pablo Ibáñez]

Gracias Mariano, gracias Luna.

Un abrazo

[Blanca N. García González]

FELICIDADES!!

Un saludo cordial Pablo.

[Pablo Ibáñez]

Gracias Blanca,

un honor tu paso por mis asuntos.

Abrazos.

[Rafel Calle]

Volver a tu bellísimo poema, amigo Pablo, siempre es un gran placer.
Abrazos.

[Pablo Ibáñez]

Gracias Rafel, amigo. Siempre un honor recibir tu visita.
Nos vemos en Cuenca.
Un abrazo.

[Marius Gabureanu]

Pablo, me ha encantado el poema, amigo. Recibe mis abrazos sinceros.

[Rafel Calle]

Gran Reserva de Alaire.

[Marius Gabureanu]

Vuelvo a esta joya poética. Uno de tus trabajos que mas me gusta, por su simbolismo, y por la belleza oscura del paisaje. Quizás me pase como a otros, que hay un hilo que me conecte al pasado, no necesariamente el individual, sino de una nación, así que diré lo que espontáneamente, recordé, al leerlo. Los rumanos estuvimos cuatro cientos años bajo la ocupación del imperio otomano. Bastante años para digerir el significado de la palabra eunuco. Pero tu poema no trata de lo que yo recuerde, sino capta la fugacidad de un momento para hacernos comprender que el pasado es el único fantasma y no es castrante lidiar con soledad en primavera. Recibe mis abrazos, Pablo.

[Pablo Rodríguez Cantos]

fingir que no es castrante
lidiar con soledad en primavera

Pablo, me ha gustado este poema en el que el ritmo de los versos endecasílabos y heptasílabos está, en el fono, tan presente. Destaco esos dos versos tan sentidos. Saludos.

[E. R. Aristy]

Primer olor a pino en el terrario,
¿me guardas el secreto? que no vengan
doctores a opinarlo.

Se han ido ya dos cosechas del jardín sin que tu mano
aliente la raíz, cubra el esqueje, domestique
el ansia de luz de la hiedra en la baranda.

Germán el aparcero abre la siega;
se acerca con un nido despeinado,
un huevo verdeazul entre las manos:
de torda, me dice, ya es el tiempo --su iris sonriente
aguza luego serio contra el viento, calibrando
la bóveda en arrullo del pinar detrás del río.

Nunca el crujido de pasos tempranos del camino
procura tu pie ahora, sino aquellas
yeguas aurorales
que entonces respiraban de tu tacto
y hoy resoplan minuciosas la niebla y la cancela
--sus lomos humeando al primer sol de noche muerta.

Tu leyenda se desliza al mentidero, cada palabra de ella,
cada idea me urge asentimiento, y ya no puedo
fingir que no es castrante
lidiar con soledad en primavera.

El ansia de luz de la hiedra en la baranda.
La bóveda en arrullo del pinar detrás del río.
Los lomos de las yeguas humeando al primer sol de noche muerta.
Y este amor de eunuco, esta batalla.

Audio:

En mis entradas y salidas me perdí del momento, pero no del poema en toda su exquisitez conceptual, su gran trasfondo cultural, su veraz perspicacia. Eres de esos poetas que se mueven con paso firme hacia El Poema. Recibe un gran abrazo, ERA