Pan duro. (Orígenes I)

[Antonia Salmerón]

Rafel, un poema bellísimo. Parece un cuento y es una historia real maravillosa. Un aplauso así de grande, poeta.

[Rafel Calle]

Muchas gracias, amigo Hernán, te agradezco el comentario y me alegra que te haya gustado el poema, en este caso, poesía social que he intentado que no cayera en la cosa planfletaria.
Un cordial abrazo.

[Rafel Calle]

Muchas gracias, amigo Juan, te agradezco el comentario y me alegra que te haya gustado el poema. Sí, tiene andalucismo, los personajes son de allí, ciertamente, tenían esa gracia innata de su tierra.
Un cordial abrazo.

[Rafel Calle]

Muchas gracias, querida amiga Alba, te agradezco el comentario y me alegra que te haya gustado el poema.
Bueno, en realidad, el romance siempre ha estado de moda; ahora, Gamoneda trabaja el romance multimétrico, pero, no hace mucho, Blas de Otero trabajó el romance polimétrico. Por mi parte, trato de trabajarlo desde una combinatoria que haya sido poco utilizada.
Un fuerte abrazo.

[Rafel Calle]

El poeta es entre otras cosas, un historiador de las peripecias incomprensibles en la experiencia humana. Tu poema es una anecdota parpable y sin embargo estamos todos ciegos de saber que conlleva a la indingencia. Tus personajes se aman, asi parece, quiza son companeros de un vicio, quiza se calientan para sobrevivir, quiza se conocieron la tarde antes, quiza su amor esta por encima de toda circumstancia. La interaccion del poeta que atribuye su vison poetica a tan patetica escena, resulta en un melodrama bello. Me hace apreciar que somos a la vez los hacedores y los ingredientes de ese pan de cada dia. Creo que tu poema es un regalo incondicional y eso lo hace sublime.

Abrazos,
ERA

Muchas gracias, amiga Roxana, te agradezco el comentario que me regalas, como siempre detallado y escrito con pasión. Tienes razón en lo que dices, somos los hacedores que mezclan los ingredientes de un detalle incondicional. Ellos, los personajes del poema, solo pudieron llegar a ser ingredientes de un festín imaginario.
Un cordial abrazo.

[Gerardo Mont]

Un poema que además de ese excelente quehacer poético que te caracteriza en la forma y en el sensible trato de los temas con metáforas e imágenes originales y bellas, es sobresaliente como cautiva y despierta el compromiso de ver más allá de las fachadas, de ver en las personas, las personas...en el humano, lo humano, en fin, sabernos parte de ese dolor que nos circunda. Un gran gusto de lectura. Mis abrazos de amigo.

[Rafel Calle]

Muchas gracias, amigo Rubén, te agradezco el comentario y me alegra que te haya gustado el poema.
Un cordial abrazo.

[Rafel Calle]

Siempre me han espantado un poco los temas sociales, no porque haya que marginarlos, sino porque es extremadamente difícil n o caer en el panfleto o en la fácil conmiseración y el tópico. Hay que saber, para hurtarse al peligro. En este caso, innecesario decirlo, el verso se va leguas y leguas de esos riesgos. El polimétrico es perfecto (a destacar los hermosos hemistiquios, atención, que no lo parecen, aquí hay definitivamente oficio). Las asonancias son suaves, se siguen las unas a las otras como si se cedieran el paso, se reclamaran. Lo hermoso de la composición como un todo no "sepulta", y esta es quizás la gracia mayor, lo denotado y su dureza, que sin ninguna duda hay que compartir, por lo vivido y por lo que se vive aun. Y a ver. Muy, muy buen trabajo.


Juli

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Muchas gracias, amigo Julio, te agradezco el comentario y me alegra que te haya gustado el poema.

Siempre he sentido una cierta atracción hacia los indigentes. En cierta ocasión asistí a una feria de construcción en Valencia, pues bien, después de cenar, a la entrada de un pub, se me acercó un chaval (ruso) que dormía en el umbral de un cajero automático. Bueno, en fin, acabé llevándomelo a Palma, después de armar un “sarao” en el pub; no le querían servir un café con leche y magdalenas y yo aproveché para dar un discurso sobre derechos humanos y tal. Como es preceptivo, cuando se trata de tales desafueros, mi colocón era de los que hacen época, jajaja.
En cuanto a los protagonistas del poema, me conmovieron contándome sus peripecias.

En esta ocasión he combinado octosílabos y hexadecasílabos simétricos, lo cual se aproxima mucho al romance clásico salvo en que yo, al utilizar un verso largo, alejo la rima.
Un cordial abrazo.

[Rafel Calle]

Muchas gracias, amigo Pepe, te agradezco el comentario y me alegra que te haya gustado el poema. Sí, es una estampa urbanita de dos desangelados.
Un cordial abrazo.

[Rafel Calle]

Me embriagaron tus versos, Rafel. Versos repletos de condición humana desbordada por la experiencia, los sentimientos, y la realidad social desde la voz del poeta. Más no podía caber. Estos versos, sin desmerecer el resto, me parece que entrañan metáforas de altura:
"Se conocieron ajados en el rincón de un suspiro,
un vapor de ambulatorio, seguramente deshielo,
y con el paso al revés
de cuanto habían supuesto. "

Un enorme placer leerte.
Un abrazo.

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Muchas gracias, amigo Pablo, te agradezco el comentario y me alegra que te haya gustado el poema.
Un cordial abrazo.

[Rafel Calle]

Muchas gracias, amiga Ana, te agradezco el comentario y me alegra que te haya gustado el poema. Sí, son octos y hexadecasílabos.
Un cordial abrazo.

[Rafel Calle]

Muchas gracias, estimado Julio, te agradezco el comentario y me alegra que te haya gustado el poema.
La historia se prestaba a buscar emocionalidad, si he conseguido una pizca, me doy por satisfecho.
Un fuerte abrazo.

[Rafel Calle]

Muchas gracias, amigo José María, te agradezco el comentario y me alegra que te haya gustado el poema.
Un cordial abrazo.

[Liz Barrio]

Llegan estos versos. El tema, la musicalidad, la ternura, la empatía... llegan. Gracias por escribirles poeta.
Un abrazo fuerte

[Rafel Calle]

Muchas gracias, querido amigo Julio, te agradezco los elogios en esta tu segunda intervención.
Un fuerte abrazo.