El tiempo es a veces desconsiderado... y no deseaba serlo contigo, Luna, pero las cosas suceden.
He vuelto a entrar depués de muchos días y he visto tu mensaje que agradezco.
Un saludo

Es tan delicada como potente tu poética.
Felicidades por expresar tanto.
Un abrazo

María, transmites una poderosa emoción serena. Hay mucho en tus versos.
Hay mucho en ti.
Un abrazo

Es raro el tiempo. Y en su rareza está colmado de optimismo que entrega si lo tomas.
Estupenda manera de decir, María.
un abrazo

Muy amable por la nota, Mar.
Ahora la echo de menos en esos atardeceres del Parque del Oeste, y un par de bares, y algunas calles, y...
Gracias a ti he descubierto una página que seguro va a interesarme, "fotosbrujas", al pasar por tu blog.
Saludos.

Madrid no tiene complejos por, Ignacio Mincholed La luz cayendo al atardecer de otoño impregnaba de misterio las pocas figuras que de vez en cuando cruzaban el pequeño puente. Se detenían un momento. Algunas apoyaban los codos sobre la barandilla dejando flotar la mirada en la suave corriente de pú...

La virtud de los ciclos es que pueden cambiarse.
Nada sucede igual incluso en lo monótono, afortunadamente.
Propones un sutil juego de acción y reacción con suficiente misterio como para caminar esa escalera.
Muy bueno. Felicidades.

María, veo poética en cada frase de tu escrito llena de sensibilidad y melancolía.
A pesar de los momentos en que todo parece bloquearse, siempre hay una lugar mágico donde todo es posible, esa Gran Vía tuya, reencuentro con un zapato de tacón.

Felicidades por ti misma.
Un abrazo muy fuerte.

Genial!!
La imagen de esta metáfora es sorprendentemente original.
Define, sugiere; es contundente.
Un microrrelato genial.

Lo inesperado, la sorpresa siempre puede suceder con alguien que se llama Inesperado...
Me gusta mucho el tono relajado que manifiestas frente a una contrariedad.
Magnífico en la sencillez.

A, Luna de Nos

Gracias Luna, me alegra lo que dices.
Pasaré por tu blog.
Saludos

La Invitación por, Ignacio Mincholed Luís Luton había vuelto a Lavanda después de dos años de ausencia. Llovía, siempre llueve en Lavanda a las seis; refrescando los colores cansados de marzo hasta que toman la apariencia de abril. Sentado en el porche comenzó a revisar la correspondencia que el of...

Aprecio lo que dices, Joan, y me alegra saber que la idea se trasmite.
Gracias por la nota.
un abrazo

Muy amable por la bienvenida, y gracias por el comentario.
un abrazo

Gracias por el comentario y tu recibimiento de bienvenida.
un abrazo