Hola Gonzalo, es una preciosidad de soneto, me encantó. Además tocaste mi alma de montañero. He sentido esas sensaciones frente a la altiva y majestuosa montaña. Sin duda, hubiese quedado formidable una foto del Montblanc. Un placer de lectura. Te envío un abrazo. Est6imado Raul, me alegra encontra...

J. Paz escribió:Hermosas montañas dibujas. Un abrazo y feliz día,

Judit

Hola Paz (buena falta nos hace) graciias por tu atenta visita y comentario

Otro abrazo para ti

Gonzalo

Curioso es un foro, si a él perteneces, pues busca, enseguida, adictos bastantes, si quieres respuestas y no visitantes pues éstos son muchos, los otros, a veces… Pues cuando tú editas y arriba apareces si quieres leerte sea cuanto antes que si pierdes tiempo ,sólo unos instantes, o estás ya en la ...

Julio González Alonso escribió:¡Vaya! Pues ya eres, junto al compañero Quinteño de Greda, otro de los seguidores cervantinos de los ovillejos... lo cual me alegra.
Salud.

Gracias Julio, acertado comentario, gracias por tu visita, eres mu amable


Un abrazo

Alberto Chicharro Vilches escribió:Excelente soneto, Atila, sobre un tema que siempre ha despertado mi máximo interés: las montañas.
Me ha gustado mucho, amigo.
Saludos cordiales

Estimado Alberto, has sido mu amablecon tu visita y con tu comentariio, gracias

Un fuerte abrazo

Pilar Morte escribió:Poema redondo. Gracias por compartirlo.
Besos
Pilar

Estimadaa Pilar, gracias por tu visita y por tu grato comentario

mi abrazo cordial

Tengo el placer y honor de inaugurar tu plástico y paisajístico soneto, Atila, un retrato de esas cadenas orográficas de nuestro planeta, que tanto respeto imponen y que se alzan victoriasas por mandato de la naturaleza entre el cielo y la tierra, son el vestigio de distintas eras geológicas y algu...

Estarán siempre ahí besando el cielo esas grandes montañas tan gigantes con sus cumbres nevadas, arrogantes, actuando de acicate y de señuelo. Son sus cimas esbeltas, desafiantes, de mi vida quimérico desvelo, pues quisiera, cual ave de alto vuelo, encontrarme en sus rocas dominantes. Y ahí están c...

SONETO A LAS MONTAÑAS Estarán siempre ahí besando el cielo esas grandes montañas tan gigantes con sus cumbres nevadas, arrogantes, actuando de acicate y de señuelo. Son sus cimas esbeltas, desafiantes, de mi vida quimérico desvelo, pues quisiera, cual ave de alto vuelo, encontrarme en sus rocas domi...

Con un poco de fortuna,
por una

muy ardiente y añorada
mirada,

daré con amor profundo,
un mundo.

Pues afirmo muy rotundo,
“como Bécquer dijo un día”
que yo también te daría,
¡por una mirada un mundo!

Por un beso, no sé, no sé lo que te diera, puede ser que un poeta hasta el sol prometió. pues ni estrellas ni lunas trataré darte yo y es que vivo despierto y olvidé la quimera. Si este humilde poeta con ardor se atreviera ofrecerte los versos que su pluma escribió, mil poemas de sueños que la musa ...