Sospecho que la vida me reclama un poco de la anciana valentía, recuperar la ensoñación de llama porque es de hielo cada día. Y si pretendo vertebrar un mundo a la medida del disfraz que pido para mutar en Segismundo que quiere liberar al reprimido buscón de incendios sensoriales, habré de converti...

No sé si sabré expresar lo Que siento, solo te diré: Creo que solo con una mirada, ya por si sola mucho habla, luego aprieto mis manos heladas con las tuyas , que son cálidas. Cómo decirte amor de mis amores que te ama mi alma entera, sin dudas, sin rencores, solo sintiendo que me entra el sentimie...

Fedegabekoa Fedegabeko gizona naiz. Jainkoari esker ez dut sinesten gizon-emakumeengan; gizon-emakumei esker ez dut Jainkoagan sinesten. Fedegabeko gizon batek es du balio ez Jainkoaren egitasmoetarako ez gizon-emakumeen planarako. Horregatik ez dakite zer egin. Horren ondorioz ez dakit zer egin be...

L E T A R G O Alguien me arrulla sobre la raya del sol afilado. Me canta, en la memoria de un delfín, en su cerebro, el pigmento cuece y produce el tierno azul de las aves anidadas bajo las plumas fluviales de las lluvias. Alguien ahogado, como una luna de hielo, me derrite. E.R.A. El poema es una ...

¡ay de mí ! Hay un rayo de locura en tu mirada y un beso aproximándose a mi boca que promete sensual un arrebato Caballero de la fina estampa. Un te quiero que de ti se escapa hace estragos en mi alma calma fluye una lluvia de estrellas donde estoy más que extasiada. ¡ay de mí! Que en mis sueños cl...

Perpetrado por el áureo corpúsculo de tu existencia, acelera el pulso de mis aguas, en un reflejo que ahoga mi oscuridad… Afloras natural en la noche de mi lengua, como un remanso de silencio, ángel cósmico, sílfide de la inocencia, peregrina alada en el fusilado laberinto del tiempo… Introduces tu...

. Ya no creía; había dejado de merendar algas en los riesgos del charco; se había liberado de algunas letras magnas, sudorosas, invalidadas por la corona del tiempo. H solía decir que sus protones eran imaginario de él arropado con el sol de los planetas, que las ideas serían alguna vez un acampado...

Iconicidad espectral Anoche vinieron y me robaron la cara, usurparon mis manos, me violaron las piernas en mitad de la sala, se llevaron mi ombligo, mis orines de flores, mi retina hinchada se rodó por la almohada, y quedé a oscuras como un embrión en la matriz de mi cama. Y vi. Vi la saciedad de l...

Borra la estela, borra toda huella y cada surco que labrara mi sudor en tus piernas. Deshazte del mapa de mis caminos y de la brújula de mi bolsillo. Dispersa mi rastro y evapora el perfume de mi pañuelo. Apaga mis colillas, vacía mi vaso, arrastra mi silla bajo la mesa. Gasta mis últimas monedas, ...

Puede que no te acuerdes cuando la vida misma terminaba después de atardecer cerca del rio y empezaba a crecer el humo de las casas. Tú eras esa muchacha que escondía su olor a tierra húmeda, su arqueología, debajo de las piedras, y había, para el mundo, una ciudad de besos subterráneos. Pero ya no...

Las flores del recuerdo Las flores de nuestra piel se disponen a embellecer el óseo espacio de otra vulnerable dulzura. ¿Qué hay en la forma humana del amor que se hace en la inacción incomprensible? Ya marchitas, las flores de nuestra piel hablan de su eternizable ternura, indefensas, nos reparten...

http://api.ning.com/files/wrR3Z9xe9sJJph*VKs*p9EToz5nHVuv2zsqT3vI2btSuLG*X5HnlA2yVr7a*X2tv*kI6pbxBLee3OMtoHgWYQS4E1ONzGm8o/13239195_1729857977289661_4117132091697972876_n.jpg Mis dedos buscan. Hay un hálito de luz y mis dedos se reencuentran en su eterno señalar. Un fruto nuevo. Manos, calle: No im...

Aún no amanece, y sobre las todavía tibias sábanas el hueco de tu adiós persiste en un intento vano por demorar el tiempo que, a su tácito paso, se impacienta, distanciándose un poco más de nuestra orilla, donde libres, pero aún cautivos de nuestro propio celo, volaban los pájaros del silencio. En e...

Lenguas de doble filo son como víboras que causan heridas, lanzan al viento mentiras, tiran la piedra y se esconden en la madriguera. Lenguas que son también como cuchillos afilados, directos van a dar en la diana del ultrajado Reptiles que se arrastran por el fango de lo falso, la vida gira, y gir...

Ramón Carballal escribió:Este poema ha confirmado las buenas expectativas que ofrecía el primero que te leí. Un excelente trabajo. Saludos cordiales.

Muchas gracias, Ramón, por tu apoyo a mis letras.
Un abrazo.