Invítame a tu siesta, mujer, invítame a tu siesta. Retocemos. Juguemos a polizones bajo la sal de nuestras sábanas. Arrojemos mantas, colchas, y almohadas, lejos, y en cueros, hagamos el amor, por una vez salvajemente, sin principios ni finales, sin caminos. Como dos caballos locos, sin orden, apas...

Concha,

pio, pio, que yo no he sio, que fué un mirlo blanco el que besando olas mimosas robó tu sentio.

Hermosa música la tuya, corazón.

Un beso desde lo alto, (de cigueña)

Javier,

gracias a tí por tu lectura y tu bienvenida.

un saludo

Como sombrillas somos, como sombrillas. Como parapetos libres e inocuos, como parapetos. Como funambulistas en el gran circo: iconos de sonrisas y sueños. Somos pasajeros, solo eso, solo pasajeros. Dueños de un gran porvenir por venir. Dueños de parajes embotellados en lágrimas. Dueños de miradas fu...

José Manuel,

tranquilo, ella me perdonó con sumo gusto.

Después.

un abrazo, compañero.

Pilar,

el gusto es mío por tu lectura.

un abrazo.

Concha Verónica,

ha veces el encanto del momento se pierde si se deja pensar a la palabra.

un beso vallisoletano ( que es igual que los demás, pero de aquí )

Reconozco mi participación en tu secuestro.
¿Y que podía hacer?
Si la miel te brotaba de cada poro
y tu cuero rosa palpitaba ensordecedor.
¿Qué podía hacer?
Sino beberme tus ansias y vaciarte.

Reconozco mi participación en tu secuestro.
¿Qué más quieres?

Lourdes,

me alegro moltto que te gustase, el placer es mío con tus palabras.

un beso.

Jota Jota,

un placer contar con tu lectura, me alegra que te guste.

Gracias sinceras.

Concha Verónica,

gracias por pasarte por mi verbo.

saludos desde este mar triguero castellano.

José, gustome. Pero sigamos dandole un poco al coco. Yo, que a veces soy excesivamente realista llevome tu poema a preguntarme... ¿y todo para que? quiero decir. El fin del cuchillo es cortar. El de la mantequilla ser untada. El de la tostada ser jalada. Me pregunto yo que quien se come la tostada u...

Rossana,

gracias por estás aquí también y por pasear tus ojos en mí.

un beso.

Juan,

cierto, me gusta mucho jugar con las palabras, sacarlas todo el jugo y juego posible. Afortunadamente tenemos un idioma que nos lo permite y nos lo facilita.

Otro abrazo para tí.

Israel,

gracias sinceras por tus palabras.

un abrazo.