Me ha gustado mucho el ritmo del poema, tiene una musicalidad cadenciosa. En especial me gustó mucho el final. Un aplauso Aurora.

Un gusto Rafa que tu presencia se haya pasado en este poema. Te mando un saludo.

Un gusto Pilar que este poema te haya gustado. Un saludo

Gracias Guillermo por tu visita en mis letras. Un saludo.

Gracias Guillermo por pasar a la lectura de estas letras. Un saludo.

Gracias Josefa por el mensaje que me dejas. A decir verdad, no es un poema que se centre tanto en la tristeza -al menos no fue esa mi intención primera- sin embargo, pues vamos que la tristeza es un aspecto ineludible en la vida misma. Un saludo y gracias por la bienvenida.

Gracias Rafael por pasar a visitar estas letras y dejar tu visita impresa. Un saludo.

Muchas gracias Aurora por pasarte por mis letras, que la lectura es el mejor aplauso que un poeta puede recibir. Te mando un saludo.

Bien has dicho Pilar, y en este caso, el poema habla precisamente de eso: del nacimiento y muerte del amor, centrando su atención en el momento álgido de la causa de la muerte del mismo. Un saludo Pilar.

Gracias Marisa, por pasar a visitarme y dejar impresa tu visita. Un saludo

Un poema corto, pero directo, con un lenguaje sencillo, pero que se convierte dicha sencillez en su mayor elegancia y con una dulzura en el grado exacto que se disfruta al leer. Un saludo.

Interesante poema por su contenido referente a las imagenes, lo cual genera un panorama bastante reflexivo. Sin embargo -y desde mi punto de vista- siento que le faltó un poco más de metáforas directas que ampliaran la intensidad del poema. Un saludo compañero.

En definitiva, con este poema, confirmo que este foro, es el mejor en habla hispana en cuanto a calidad poética se refiere. Tu poema tiene contenido, esencia, cosa que hoy en día es muy dificil observar en la poesía ya no digamos de vanguardia, sino de verso libre. Me quedé pensando en esta metáfora...

Este poema me ha gustado mucho por su propuesta: un ángulo diverso en la voz poética y en su vector primordial. Sin duda alguna se ha llevado mi aplauso.

No fue la plaza apagada, ni la rutina del reloj hambriento, no... Y no se mece el pálpito nevado en las cortinas del viento, tendidas en la cama. No fue la lengua del foco, ni la tibieza del agua, no la tormenta en la tarde, no el grito de los mercaderes del silencio. Por algo que no habita, que mue...