Muchas gracias, Roberto, por pasar a leer y dejarme tus palabras.

Saludos.

Martín Desormeaux.-

Muchas gracias Daniela (che rubia desaparecida), J.J.M, Marisa, Victoria y Josefa. Muy amables por venir a leer.

Alondra, sí, son para eivril. No quería que terminase abril.
Un gran beso y un abrazo.

Martín Desormeaux.-

Vine para decirte feliz cumpleaños, April, lo de que cada año estás más bonita ya lo sabes. Por cierto, siempre me ha gustado tu disléxico pensamiento para escribir.

Un beso grande
y muchos abrazos.

Martín Desormeaux.-

Hola, Aubriel, un gustazo leerte. Gracias por la visita.

Abrazo.

Martín Desormeaux.-

Muchas gracias, Luna, por venir a leerme y tus amables palabras.

Saludos para ti.

Martín Desormeaux.-

Es un gusto poder volver a leerte por acá, Ramón. Por lo visto sigues siendo unas de las mejores lecturas que se puede encontrar.

Un abrazo
Martín Desormeaux.-

para eivril 1. Vengo de un viaje sin fecha. Las maletas se han extraviado en alguna habitación, en un nombre que ya no recuerdo: en un país de mujeres con ojos claros. Tienes en las manos letras, marcas que no sé reconocer, recordatorios que has recolectado en mi ausencia. Motivos para cerrarme las...

Hola, Aubriel, ¿qué hacés? Bueno, sí, amiguitos de cenizas, qué problemón que han armado. Gracias por pasar, nos estamos leyendo.

Abrazos.
Martín Desormeaux.-

Perdón por la tardanza, Ramón, agradezco tu lectura en ese momento. Un abrazo.

Gracias, Israel, por leerme y dejar tus palabras. Saludos.


Muchas gracias, ERA, por la visita en ese entonces. Un saludo.

Martín Desormeaux.-

¿Qué hacés, rubia? Vine a leerte, a revivir un rato los ojos, qué sé yo. Me alegro de que andes por acá.

Abrazo entre nubes de ceniza.

Martín Desormeaux.-

Muchas gracias, querida Alejandra, es una gran alegría -siempre- poder encontrarme con tu presencia en estos lugares.

Un abrazo.

Martín Desormeaux.-

O lo inútil de la belleza, querida Alejandra. Qué gusto poder leerte por estos lares, me gusta eso de evaporar las letras; de alguna manera la desaparición -o el arte "mágico" de hacer desaparecer- denota una necesidad de escape.

Te mando un abrazo grande.

Martín Desormeaux.-

es el mundo un puñado de sal dentro de sus manos un puente quebrado que nos incomunica con el idioma del ruido, una inocencia que no sabe cómo llamarse después de nombrar tanto la inocencia viene para hacer crecer las semillas enterradas en el patio, a encumbrar con hilos las partículas desperdigada...

Hola, rubia, ¿cómo andas? Qué bueno volver a leerte otra vez, me gustó eso de lo pobre y de muchos libros, eh? No, en serio, me gusta el fondo del poema; que además se acota al título. Difiero de la cita, porque en este lado del mundo se coge no se folla.

Beso, nena.
Martín Desormeaux.-

Gracias, Joan, por pasar.

Saludos
Martín Desormeaux.-