Gracias por tu paso, Hallie. Te deseo un Felicísimo 2009, cargado de versos.
Un abrazo. Ana.

Gracias por tus palabras, Luís. Me leíste por dentro, y no te imaginas cuanto reconforta esta lectura, cuando "La carga es más poderosa que el viento navideño".
Feliz Año.
Ana.

Que te llegue mi abrazo, también, en Navidad
Feliz Año, Cruz.
Ana.

Gracias por tu paso, y por la reflexión tan acertada que haces. A veces la Navidad, es como un baile de máscaras.
Un abrazo, y encantada de saludarte.

Ana.

Estoy encantada de saludarte, y muy agradecida por el verso que dedicas a mis versos.
Un abrazo, Joan.
Ana.

Caen campanas y estrellas
Lloran los hombres de nieve


Trineos sin renos cascabeleros
laceran las aguadas nieves grises


Elfos y pajes errantes
Delirantes cabalgatas eternas
Regalos en cajas rotas



Tu ausencia se congela
en mi corazón muerto

Sin Navidad

Gracias, Oscar, por tus generosísimas palabras. Acepto encantada tus sugerencia, y tomo nota. La verdad es que cambiando el tiempo verbal la rima y la forma mejoran. Me estoy iniciando en la poesía y necesito sugerencias con la métrica.
Un abrazo y gracias, otra vez.
Ana.

Gracias, Oscar, por tus generosísimas palabras. Acepto encantada tus sugerencia, y tomo nota. La verdad es que cambiando el tiempo verbal la rima y la forma mejoran. Me estoy iniciando en la poesía y necesito sugerencias con la métrica.
Un abrazo y gracias, otra vez.
Ana.

Gracias, Rafael, por tu paso, y por tus palabras. El sabor que te dejó mi poema, se traduce en palabras lo suficientemente sabrosas para seguir intentándolo.
Un abrazo. Ana.

Gracias por pararte en mi poema. Me encantó tu percepción.
Un abrazo. Ana

¡QUÉ ARTE, MAESTRO!

(...)
En algo se parecen mis zapatos al amor
Que por más siglos de espera
Nadie hay quien acierte
con la talla diestra.

Un millón de aplausos.
Ana.

Hoy quiero hablaros de mi padre
(...)
La vida fue su única intención
(...)



Su única intención fue la vida de todos ycada uno de nosotros.
Un beso enorme e infinito.
Ana.

Bendita la palabra, cuando tú la dices y la dices como ahora, aún cuando la maldices. Ya lo creo, es un poema mágnificamente escrito, y con sabio contenido.
Un saludo, con toda mi admiración.
Ana.

Anhelo que mi ida - cuanto anhelo- no arroje sobre tí necesidad de olvido, y sea este amor en tu memoria un dulce eco. Me encanta esta última estrofa. Es un auténtico placer poder leerla y tenerla ahí para disfrutarla. Enhorabuena. Ana.

Me gustó tu poema. Creo que es una escenificación perfecta del ahogo que sería una casa sin ventanas. La concatenación de imágenes me dejan sin respiración, con la estratégica estructura monótona, y a la vez trepidante, que convierte las estancias en laberintos.
Sí, que me gusta mucho.
Ana.