Tus versos me han traído al recuerdo, no sé por qué, el ambiente de Casa tomada , uno de mis relatos favoritos del Gran Cronopio. Claro está que aquí parece tratarse de la presencia —luminosa a la vez que oscura, una a la vez que múltiple— del ser amado en todo. La estética lacónica del poema lo dej...

Mis condolencias a su familia y a los compañeros del foro.

Se va una de las voces emblemáticas de esta comunidad.

Se va pero se queda.

Anda en esta recopilación de mirlos un como viento leve que conduce al lector hacia dentro. Este "dentro" de que hablo abarca las cosas vistas como muebles y como tomas (sucesivas o independientes) de una cinta cinematográfica. Se da entonces el disruptivo fenómeno de cierto crecimiento en...

Grandísima aportación en forma de glosa esta que te sacas del sombrero.

Gracias a ti por aportar la madera para este ensayo.

Ensayo sobre Piras humanas , cuento de grande aliento. [/i] I Hay que repantigarse para acometer la ilustre tarea de sorberle a este relato su miel. Que Séneca nos perdone este y otros excesos náuticos: Totus mundus agit histrionem . Quédese el alfarero en su tienda que ya la noche punza y no hay g...

El tiempo es veleidoso cuando se lo espera. Qué nutricio tu poema que nos enseña a otear esas y otras distancias inimaginables a ras de suelo. Descubro en su arranque tu buen hacer a la hora de describir (y, en esa medida, de revertir) las grietas y los rasguños de aquella fotografía. La voz poética...

Me encantan estas naderías. Estos hombrecitos verdes, trabajando en libros que encuentran en la otra realidad, son unos viejos gruñones. Que también pudieran ser los enanitos de una Blancanieves-Bernarda muy especial. La que encuentra cosas basándose en no buscar. Que bien puede ser el quid de nues...

A la corsaria que lo ha pedido IACOMO.— ¡Y que les crujan a sonetos parlanchines! ( Cierra la puerta del local con furia ). Menudos sinvergüenzas esos. ¿Se han creído que no iba a notar sus triquiñuelas? ¿Que con esas manitas de roedor no les iba a pillar yo! Que baje el mismísimo soberano y lo vea...

Ahí los dados echados y la combinación imprevista, que es algo de lo que hablábamos esta mañana. Ahí tú con la tarde preparada bajo el brazo y los aromas del verano y la arquitectura del deseo cumpliendo su parte con dedicación en ti, pero otra cosa quiso esa línea temporal. Esos carriles se anduvie...

Hay aquí canto y susurro y zapateo. Machado se presta para divisar contigo las ondas de mar que te comparten un faro, una narrativa emergente, una nueva manera de contar las cosas sin explicitarlas; contigo se recogen y se despliegan con tacto, saben de remolinos y de audaces ángulos de caídas, y tú...

Y dos partes, y tan blancas y tan negras de improviso. Así se lee el poema: es una mayólica, un síndrome, una azucena, un vino fermentado, una falena sobre un atril (ya próxima a sucumbir al contradictorio viento del norte). Las imágenes ecuestres horadan la conciencia de tu sueño: la doblan, la con...

¡Vaya! La obra transcurre como una partitura que se hubiera escapado de su grimorio. Virtuosos dedos los que repintaron el juego primigenio, el del desdoblarse en saberes aromáticos y dejarlos prender los cuerpos. La docta nota histórica hace de telonera del ángulo inopinado: existen golpes de efect...

Los tres mirlos parecen querer decir lo mismo desde lejanas latitudes. Recuerdan al mundo en movimiento: sueños aridecidos, gestas que cantar y una música de fondo (compuesta de animales, de ángeles y de demonios) que persiste en su ser, como todas las cosas hacen según Spinoza. Lo patético se toma ...

Hay lo que parece aquí un tejido, un telar de raíces por donde los oficios y las esperanzas pasan. En lo que tiene de pantalla (¿de legado?), el nombre propio es derribado a martillazos y un faro a la distancia forcejea con la niebla. Así se arriba a las incógnitas de todos los días, a esas que, com...

La descripción exhaustiva tiene algo de arma arrojadiza, algo de tifón al acecho. Lo advertimos casi al instante. Puede aportarnos la información que buscamos o, también, atraer nuestra atención hacia un punto exacerbado, a lo mejor a un dato de infeliz memoria. La eternidad de lo marchitable consis...