Editorial Alaire

Qué ruido tan triste el que hacen dos cuerpos cuando se aman

Luis Cernuda


Es tan triste la carne cuando ama.

Es la victoria de la oscuridad
sobre toda la luz,
el decorado mínimo que alcanza
las grandes dimensiones de la muerte.

Parece un manantial que se derrumba
gota a gota en los labios de la tierra,
una sombra alargada del hombre y la mujer,
un otoño ligero de equipaje.

Me recuerda a las hojas de los árboles
en noviembre tardío,
al frágil sentimiento
de un moribundo, a la resignación
de los que pronto morirán a manos
de la naturaleza.

El roce de unos dedos se parece
a los depredadores que olfatean
la noche en busca del olor a sangre.

Para lanzar sus fauces de repente,
para invadir de pronto la inocencia,
para morder el cuello de su víctima
y mutilar la voz y el pensamiento.

No todo es siempre lo que parece, verdad? Pintas como si fuese triste el momento más elevado de un ser humano, cuando prescinde de la consciencia por sentirse y compartir el animal. ¿Hay pureza mayor que esta?

Poemazo, desde mi subjetivo lugar de lectora que desiste de pensar en la poesía por sólo disfrutar de ella, a lo animal.

Bueno, la idea no es mía, Viví, sino del gran Cernuda. Yo sólo he creado otras imágenes a partir de su poema. Y sí, somos animales, pero a veces, lo encerramos en el mundo, que no deja de ser un enorme escenario.

Un beso grande. Y gracias por estar.

Una imagen algo triste, de la unión perfecta de la carne,
del deseo humano, del amor ...
Pero enmarcada, en versos bien logrados.
Un gusto estar presente.

Bueno, esa era la idea, Lila, hacer de lo más bello, el deseo unido al amor, una decadencia, como el cuerpo va madurando hasta el final de la unión.

Un saludo. Y gracias.