La demencia de la poesía

[Alejandro Costa]

Magnífica declaración de principios, Alejandro:

Me ha encantado.

Un beso
Enhorabuena
Ana

Mil gracias, Ana.

Un beso.

Salud, paz y felicidad.

[Alejandro Costa]

No lo sueño,
tampoco lo imagino.

Suena música en el norte de mi costado,
en la imagen repetida en la caspa de la mirada.

Hay que reclamar ayuda cuando te aturde el sudor de un reloj,
cuando la fe es devorada por culebras que anidan en tus fantasías,
cuando ya no cae lluvia sobre las sementeras
ni tropiezan los crepúsculos en los cristales de las ventanas.

Más no sabemos,
no sé qué sucede.

Hay campanas que golpean la sensibilidad de nuestros momentos,
de los míos.

La mente navega en mares con velas de libélulas,
y un carruaje de sentimientos a los que,
unos delfines mágicos hacen de escolta.

Y en ello se nos mueve,
se me mueve el mundo de la fantasía,
aunque otros lo llamen locura,
los psiquiatras lo resuelvan con recetas tormentosas
y los boticarios nos envenenen con sus fármacos.

Pero no entienden,
ni saben luchar contra la verdad.

Yo vivo en constante locura de felicidad.

Mi sillón me abraza,
del techo cae miel con dulce sabor a poesía,
libros de Lorca, Neruda, Hernández,
descansan junto a un vaso de agua,
junto a un cenicero afónico,
acompañando la mirada,
de unos ojos,
que, en su demencia,
tan solo ven la hermosura de un poema.

Y aún,
entre silencios,
halos de sol serenos,
mis amigas, las arañas,
protegen con su red,
las columnas de los castillos, donde ordenadamente,
forman los ejércitos de los grandes filósofos de la belleza.

Y los galenos no lo entienden,
siguen entintado recetas.

¡Qué guarden sus fármacos los boticarios!

Nuestra receta son los versos,
mi receta son los versos,
nuestro fármaco,
mi fármaco…, la poesía.

Esplendoroso poema a las visiones de la poesía, Alejandro! Fascinante tu poesía! Abrazos

Enorme comentario en forma de obsequio me dejas.

Me alegra que así lo sientas.

Gracias.

Un beso.

Salud, paz y felicidad.

[Alejandro Costa]

Alejandro, hermosa la manera que tienes de ver, sentir y plasmar la poesía.

Aunque me ha encantado el poema en su conjunto, rescato estos versos como mis favoritos:

Hay que reclamar ayuda cuando te aturde el sudor de un reloj,
cuando la fe es devorada por culebras que anidan en tus fantasías,

Saludos.

Es un comentario que me emociona.

Te agradezco tu visita y que me hagas sentir de esta manera.

Eres un amor.

Besos.

Salud, paz y felicidad.

[Ara López]

Es un comentario que me emociona.

Te agradezco tu visita y que me hagas sentir de esta manera.

Eres un amor.

Besos.

Salud, paz y felicidad.

Estimado Alejandro, amor eres tú que en mí lo reflejas.

Besos.

[Carmen Moro Frías]

Hola Alejandro
Buenísima esa demencia que nos acompaña y que se cura leyendo y escribiendo, en el silencio.
Gracias de todo corazón
Un abrazo

[Alejandro Costa]

Muy bueno este poema que propone la poesía como cura universal para todos los males. La poesía, mi estimado Alejandro, es una locura muy sana, sin duda. Me ha encantado tu poema, uno se engancha fácilmente a su lectura.
Enhorabuena.

Un fuerte y loco abrazo poético.

Siempre tan amable, Ramón.

Agradezco tu buen comentario y tu valoración.

Un abrazo.

Salud, paz y felicidad.

[Alejandro Costa]

Es un comentario que me emociona.

Te agradezco tu visita y que me hagas sentir de esta manera.

Eres un amor.

Besos.

Salud, paz y felicidad.

Estimado Alejandro, amor eres tú que en mí lo reflejas.

Besos.

No cariño, tan solo un simple creador de locuras y sueños.

Eres un encanto. Ante este tipo de personas, ¿quién no sería amable?

Sí, Ara, eres un amor.

Infinitos besos.

Salud, paz y felicidad.

[Alejandro Costa]

Hola Alejandro
Buenísima esa demencia que nos acompaña y que se cura leyendo y escribiendo, en el silencio.
Gracias de todo corazón
Un abrazo

¿Gracias?

Soy yo quien tiene que dar las gracias.

Gracias, por seguirme, por valorarme, por acompañarme.

Un beso.

Salud, paz y felicidad.

[Maria Lua]

"¡Qué guarden sus fármacos los boticarios!

Nuestra receta son los versos,
mi receta son los versos,
nuestro fármaco,
mi fármaco…, la poesía."

Muyyyy bueno tu poema, Alejandro!
Dijo el poeta brasileño Mario Quintana:
"Fora da Poesía não há salvação!"
( "Fuera de la Poesía no hay salvación!")
Un abrazo
Maria Lua

[Ara López]

Es un comentario que me emociona.

Te agradezco tu visita y que me hagas sentir de esta manera.

Eres un amor.

Besos.

Salud, paz y felicidad.

Estimado Alejandro, amor eres tú que en mí lo reflejas.

Besos.

No cariño, tan solo un simple creador de locuras y sueños.

Eres un encanto. Ante este tipo de personas, ¿quién no sería amable?

Sí, Ara, eres un amor.

Infinitos besos.

Salud, paz y felicidad.

El que me quiere sonrojar... ajajajjaa
Gracias por esas palabras.

Besos.

[Alejandro Costa]

"¡Qué guarden sus fármacos los boticarios!

Nuestra receta son los versos,
mi receta son los versos,
nuestro fármaco,
mi fármaco…, la poesía."

Muyyyy bueno tu poema, Alejandro!
Dijo el poeta brasileño Mario Quintana:
"Fora da Poesía não há salvação!"
( "Fuera de la Poesía no hay salvación!")
Un abrazo
Maria Lua

¡Vaya! ¡Maria Lua por aquí!

Gracias de corazón por tu visita y comentario.

Celebro que te gustase.

Da recuerdos.

Un beso.

Salud, paz y felicidad.

[Alejandro Costa]

Estimado Alejandro, amor eres tú que en mí lo reflejas.

Besos.

No cariño, tan solo un simple creador de locuras y sueños.

Eres un encanto. Ante este tipo de personas, ¿quién no sería amable?

Sí, Ara, eres un amor.

Infinitos besos.

Salud, paz y felicidad.

El que me quiere sonrojar... ajajajjaa
Gracias por esas palabras.

Besos.

Besos, gracias y un poquito de polvos de talco para ese sonrojar tan tierno.

Salud, paz y felicidad.

[Ricardo López Castro]

Tremendo.

[Alejandro Costa]

Tremendo.

¿Tremendo?

Tremendo eres tú, compañero, poeta, amigo.

Gracias con el corazón.

Un abrazo.

Salud, paz y felicidad.

[F. Enrique]

Hay que reclamar ayuda cuando te aturde el sudor de un reloj,
cuando la fe es devorada por culebras que anidan en tus fantasías,
cuando ya no cae lluvia sobre las sementeras
ni tropiezan los crepúsculos en los cristales de las ventanas.


De lo mejor que te he leído, Alejandro, quizás la poesía sea el lenguaje lógico que perdió la razón, pero sigue teniendo sentido y para ello acude al lenguaje metafórico, en el que te manejas cada vez mejor.

Un abrazo.