Editorial Alaire

A. Satír escribió: ↑Jue, 21 Dic 2023 15:30 Los jardines que dejé
y las aves que alimenté,
sabía que eran pasajeras,
tal como llega el sol
carbonizándolo todo.
Unas volaron a otra primavera,
otros marchitaron.
Brotaron los otoños
de todo lo que moría,
más tarde, el invierno.
Creciendo dentro,
tormenta a tormenta,
los queltehues internos
picoteaban del caudal salado
los cristales que aun brillaban.
La soledad inundó la vasija
que me contiene,
a veces, cuando el cielo es deshabitado,
el reflejo negro de ti me susurra,
del vacío que construye una catedral,
los ecos de mí mismo me llaman.
No puedo amigo mío,
no puedo elevar mi cometa,
ahí fuera la tempestad,
la poesía no puede salvarme,
pero si mi razón,
la frialdad para matar lo que siento,
porque fuera de este mundo
siempre me espera una grieta de luz,
un queltehue que bebe mis lágrimas.

Concha Vidal escribió: ↑Jue, 21 Dic 2023 19:38 Qué pena que los poemas se nos pasen d largo. Qué deprisa vivimos y que poca pausa dedicamos a los demás.
Siento ser tan dura.
Abrazos mediterráneos , eso no se me olvida.