Editorial Alaire

Te escuché lejana, con interferencias,
en una emisora de radio, a mitad de camino
entre el sueño y el remordimiento,
la última persona en una ruta polvorienta
con algo que decir.

La brisa penetraba suavemente
a través de la ventana. Tu voz arenosa,
la guitarra acústica gimiendo arpegios
en Si menor, el sonido azul de la steel,
todo presagiaba algo mejor por llegar.

Yo también viví allí,
yo también fui esa persona
presa de lo inmediato
que podría dormir un poco esa noche,
que podría soñar un poco esa noche.

Cuando todo es ya retrovisor
y zumbido de la memoria
y la carretera vertical se pierde en el horizonte,
sólo nos queda someternos al tiempo
y a su inexorable sucesión de ausencias.

Ella es la mirada perdida de un cuadro de Hopper
gritándonos desde su desamparo
que aún tenemos una última canción que cantar.

Ella es la voz, la manifestación
entrecortada y mágica de un poder
que, desde una emisora de radio,
ilumina este desierto último.

.

Has compuesto un poema muy bello Enrique, me adelanto a felicitarte. De la serie para mí es el que más me gusta, siendo los otros excepcionales también, por el alineamiento de imágenes tan bien dispuestas para generar en mí una pequeña y completa película en honor de ese tema Friend of The Devil, con versos tan evocadores.
Un abrazo y salud

Magnífica idea que plasmas en un cuadro poético dinámico y hermosísimo.
Estuve allí en algún lugar del coche, en las ondas que confunden la arena caliente y las certezas del viaje.

Muy buenas las referencias y su inclusión, Enrique.

Placer de lectura; salud y felicidad a montones.

Magnifico poema que es un placer leerlo con imágenes bien puestas.
Un abrazo y felicidades

enrique sanmol escribió:

(Friend of the devil – The Grateful Dead, versión de Connor Desai)

Te escuché lejana, con interferencias,
en una emisora de radio, a mitad de camino
entre el sueño y el remordimiento,
la última persona en una ruta polvorienta
con algo que decir.

La brisa penetraba suavemente
a través de la ventana. Tu voz arenosa,
la guitarra acústica gimiendo arpegios
en Si menor, el sonido azul de la steel,
todo presagiaba algo mejor por llegar.

Yo también viví allí,
yo también fui esa persona
presa de lo inmediato
que podría dormir un poco esa noche,
que podría soñar un poco esa noche.

Cuando todo es ya retrovisor
y zumbido de la memoria
y la carretera vertical se pierde en el horizonte,
sólo nos queda someternos al tiempo
y a su inexorable sucesión de ausencias.

Ella es la mirada perdida de un cuadro de Hopper
gritándonos desde su desamparo
que aún tenemos una última canción que cantar.

Ella es la voz, la manifestación
entrecortada y mágica de un poder
que, desde una emisora de radio,
ilumina este desierto último.

.

Un poema que nos sintoniza en la ruta solitaria quizas, pero estimulante de la cultura pop abriendose paso en nuestro inconciente y nuestra glandula pineal. Es una obra esplendorosa y evocativa: "Ella es la mirada perdida de un cuadro de Hopper
gritándonos desde su desamparo
que aún tenemos una última canción que cantar."


Wow! Me volaste los sesos, Enrique! Abrazos, ERA.

Un buen poema que he disfrutado.

Un abrazo.

"Ella es la mirada perdida de un cuadro de Hopper
gritándonos desde su desamparo
que aún tenemos una última canción que cantar.

Ella es la voz, la manifestación
entrecortada y mágica de un poder
que, desde una emisora de radio,
ilumina este desierto último"

No conocía esta preciosa interpretación de "Connor Desai" que acabo de escuchar. El escenario y desarrollo del poema recoge y expresa magníficamente las sensaciones expresadas en el canción.
Estoy releyendo "2066" de Roberto Bolaño, y precisamente acabo de pasar por un capítulo donde un personaje, el periodista norteamericano "Fate", recorre de noche el desierto mexicano de frontera mientras va escuchando jazz. Las sensaciones y el ambiente descritos por Bolaño tienen mucho parecido con el tratamiento que das tú al poema.

Todo un placer de lectura, viejo amigo.

Abrazos y salud.

enrique sanmol escribió:

(Friend of the devil – The Grateful Dead, versión de Connor Desai)

Te escuché lejana, con interferencias,
en una emisora de radio, a mitad de camino
entre el sueño y el remordimiento,
la última persona en una ruta polvorienta
con algo que decir.

La brisa penetraba suavemente
a través de la ventana. Tu voz arenosa,
la guitarra acústica gimiendo arpegios
en Si menor, el sonido azul de la steel,
todo presagiaba algo mejor por llegar.

Yo también viví allí,
yo también fui esa persona
presa de lo inmediato
que podría dormir un poco esa noche,
que podría soñar un poco esa noche.

Cuando todo es ya retrovisor
y zumbido de la memoria
y la carretera vertical se pierde en el horizonte,
sólo nos queda someternos al tiempo
y a su inexorable sucesión de ausencias.

Ella es la mirada perdida de un cuadro de Hopper
gritándonos desde su desamparo
que aún tenemos una última canción que cantar.

Ella es la voz, la manifestación
entrecortada y mágica de un poder
que, desde una emisora de radio,
ilumina este desierto último.

.

Me ha gustado tu poema y su música. La he escuchado, también me gusta.
La música es magia. No hubiéramos podido viajar sin ella.

Saludos

Que nombres a Grateful Dead, una de mis bandas favoritas, y hagas referencia a su tema "Friend of the devil", ya te de unos cuantos puntos, pero luego, además, que te descuelgues con un poema tan maravilloso como este, pues que te voy a decir... Enhorabuena.

Un abrazo.

No conozco su música pero he leído tu poema y me ha encantado. Un despliegue de estupendos versos. Felicidades.
Abrazos

Armilo Brotón escribió:Has compuesto un poema muy bello Enrique, me adelanto a felicitarte. De la serie para mí es el que más me gusta, siendo los otros excepcionales también, por el alineamiento de imágenes tan bien dispuestas para generar en mí una pequeña y completa película en honor de ese tema Friend of The Devil, con versos tan evocadores.
Un abrazo y salud

Me alegra mucho que fueras tú precisamente quien iniciaras los comentarios, Armilo, máxime si, por lo que comentas, te gustó esta entrega. Sigo con mi serie de escritos inspirados por canciones o, en general, música. No sé cuánto tiempo durará, pero la verdad es que por ahora me encuentro a gusto con este tipo de origen de la inspiración...

Muchas gracias por dedicarle tiempo a este espacio. Un abrazo, compañero.

Creo que para facilitar la lectura debería haber incluido el enlace a la música... Intentaré subsanar mi error... Ahí va:

[BBvideo 560,340][/BBvideo]

Enrique,

me gusta mucho, amigo. Me identifico mucho con las referencias que propones, el sonido del country-rock americano, los cuadros de Hopper. A mí me encanta la imaginería de la América profunda, de las road movies, me gustaría tener la capacidad de escribir poemas en esa calve. Por mi época son más de REM que de Gratefull Dead, pero al final es el mismo ambiente. Creo que has sabido captarlo con gran maestría.

Abrazos.

Hermoso e interesante trabajo, amigo Enrique.
Felicidades.
Abrazos.

Hallie Hernández Alfaro escribió:Magnífica idea que plasmas en un cuadro poético dinámico y hermosísimo.
Estuve allí en algún lugar del coche, en las ondas que confunden la arena caliente y las certezas del viaje.

Muy buenas las referencias y su inclusión, Enrique.

Placer de lectura; salud y felicidad a montones.

Me alegro mucho, Hallie, que te detuvieras en este cuadro musical y lo hicieses tuyo.

¡Amor, paz y felicidad!

Simon Abadia escribió:Magnifico poema que es un placer leerlo con imágenes bien puestas.
Un abrazo y felicidades

Muchas gracias, Simón, por tu lectura y amable valoración.

Otro abrazo fuerte para ti.