Editorial Alaire

La garza en el rio


Está ese pájaro acuático,
/ Lindante a otros seres.
En el universo hay figuras reiteradas.

Allá en la eternidad del río una garza,
La blanca, y que tira sonidos al viento.

Veo otra garza, otro límite de grandeza.

Están

Las manos en el río del hombre,
Y este pájaro que se yergue cual rey.

El silencio de la noche es el guía
Y la vigía del río con sus faros eternos,

El leyó de flores y los camalotes,
Y el río otro río de Heráclito
Ese que desnudó la blancura.

Otra garza y otro oro del tigre
Y el grito del hombre

La miel y la garza y esos pájaros
Nunca
Siempre el viento al sur.

Gustoso de volver a leerte de nuevo, Javier. Tan interesante como siempre.

Un abrazo.

Javier Dicenzo escribió:La garza en el rio


Está ese pájaro acuático,
/ Lindante a otros seres.
En el universo hay figuras reiteradas.

Allá en la eternidad del río una garza,
La blanca, y que tira sonidos al viento.

Veo otra garza, otro límite de grandeza.

Están

Las manos en el río del hombre,
Y este pájaro que se yergue cual rey.

El silencio de la noche es el guía
Y la vigía del río con sus faros eternos,

El leyó de flores y los camalotes,
Y el río otro río de Heráclito
Ese que desnudó la blancura.

Otra garza y otro oro del tigre
Y el grito del hombre

La miel y la garza y esos pájaros
Nunca
Siempre el viento al sur.

Sí, es así, contemplar la naturaleza tiene bordes...todo parece contenerse ahí en la mirada. Me gustó este poema que pasa de la figura de un rey (la garza ) a los camalotes (lirios de agua, jacintos o reinas) a las reinas y que se traslada acuática del río de Heráclito hasta los tigres de oro de Borges.
Muy bello este poema, Javier.

Un abrazo

Robarle a la garza su blancura,
al águila; la uña con la que raya
el día.

Hoy a la mañana vi una garza, que blanca, que grácil me pareció su vuelo.
Me sorprendió que todavía en una ciudad como Mendoza se vieran esos pájaros.

Me gusto tu poema. Un cordial saludo

Interesante trabajo, amigo Javier.
Abrazos.

Un bello recorrido que me gustado, Javier.
Felicidades y un abrazo.

Enrique gracias por tu concepto.
javier

Javier Dicenzo escribió:La garza en el rio


Está ese pájaro acuático,
/ Lindante a otros seres.
En el universo hay figuras reiteradas.

Allá en la eternidad del río una garza,
La blanca, y que tira sonidos al viento.

Veo otra garza, otro límite de grandeza.

Están

Las manos en el río del hombre,
Y este pájaro que se yergue cual rey.

El silencio de la noche es el guía
Y la vigía del río con sus faros eternos,

El leyó de flores y los camalotes,
Y el río otro río de Heráclito
Ese que desnudó la blancura.

Otra garza y otro oro del tigre
Y el grito del hombre

La miel y la garza y esos pájaros
Nunca
Siempre el viento al sur.

Muy bello y sugestivo poema, Javier. A medida que entra en escena otra garza, el lector puede, si lo desea ver en esta escena un movimiento intelectual, un unisono canto de siempre, aunque "Nunca ' es su penúltimo verso enigmático. He disfrutado de tu gran ingenio, Dicenzo. Abrazos, E. R. Aristy

Carmen gracias por tu paso por mi obra.

Gustavo gracias por tu comentario .

Rafel gracias ya hace años que vamos por los caminos de la poesía.

Javier Dicenzo escribió:La garza en el rio


Está ese pájaro acuático,
/ Lindante a otros seres.
En el universo hay figuras reiteradas.

Allá en la eternidad del río una garza,
La blanca, y que tira sonidos al viento.

Veo otra garza, otro límite de grandeza.

Están

Las manos en el río del hombre,
Y este pájaro que se yergue cual rey.

El silencio de la noche es el guía
Y la vigía del río con sus faros eternos,

El leyó de flores y los camalotes,
Y el río otro río de Heráclito
Ese que desnudó la blancura.

Otra garza y otro oro del tigre
Y el grito del hombre

La miel y la garza y esos pájaros
Nunca
Siempre el viento al sur.

Este poema me trae recuerdos de las garzas de color rosa, viendolas desde arriba.
En conjunto ya de por si es una pintura y el poeta se engancha.
Me ha gustado, saludos cordiales.- Mirta.-

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Allá en la eternidad del río una garza,
La blanca, y que tira sonidos al viento.

Veo otra garza, otro límite de grandeza.

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El leyó de flores y los camalotes,
Y el río otro río de Heráclito
Ese que desnudó la blancura.

Otra garza y otro oro del tigre
Y el grito del hombre
…………………………"

Un gran poema, Javier, del que destaco los versos que dejo más arriba.

Todo un placer de lectura, querido amigo.

Abrazos y salud.

Marisa gracias por tu paso por mi poema.

Aristy gran analisis sobre mi obra .