La utopía cotidiana (1)
Publicado: Sab, 01 Jun 2019 12:49
"La prefiero compartida antes que vaciar mi vida”
(Pablo Milanés)
Dime el secreto del por qué siempre la magia de luz que hay en ti todo lo llena. Dime ese secreto virgen que nunca te descubre, aunque aparezcas repentina como un crepúsculo en madrugada. Necesito saber ahora, de dónde emerge de ti esa fuerza vespertina que todo lo posee, como si fueras cascada de espuma donde arcángeles desnudos se bañan y brillan en el resplandor de tu sonrisa. Dime por qué una caricia húmeda resbala por tu piel, en días de lluvia, y presiento que es el mar que en sus mareas te mece. Dímelo ahora que el viento trae en sus manos una leve sacudida de tu voz y se hace tacto en mis oídos. Quiero saberlo, por que presiento el latir confuso de tu corazón igual que un pulso herido que palpita a la intemperie de mi vida. Necesito saber por qué esta música lejana sólo es un adagio triste cuya melodía resurge del fondo de esa tierra que tanto me codicia. No convoques al silencio, y dime de qué sabor es el beso, o el labio donde en ti beben los dioses del deseo. Tú que acostumbras a traspasar mi espacio como esa nube gris que tiene querencia al rayo, dime, dónde duermen tus sueños recién nacidos, dónde respiran, para poder hacerles un sitio en mi utopía.
(Pablo Milanés)
Dime el secreto del por qué siempre la magia de luz que hay en ti todo lo llena. Dime ese secreto virgen que nunca te descubre, aunque aparezcas repentina como un crepúsculo en madrugada. Necesito saber ahora, de dónde emerge de ti esa fuerza vespertina que todo lo posee, como si fueras cascada de espuma donde arcángeles desnudos se bañan y brillan en el resplandor de tu sonrisa. Dime por qué una caricia húmeda resbala por tu piel, en días de lluvia, y presiento que es el mar que en sus mareas te mece. Dímelo ahora que el viento trae en sus manos una leve sacudida de tu voz y se hace tacto en mis oídos. Quiero saberlo, por que presiento el latir confuso de tu corazón igual que un pulso herido que palpita a la intemperie de mi vida. Necesito saber por qué esta música lejana sólo es un adagio triste cuya melodía resurge del fondo de esa tierra que tanto me codicia. No convoques al silencio, y dime de qué sabor es el beso, o el labio donde en ti beben los dioses del deseo. Tú que acostumbras a traspasar mi espacio como esa nube gris que tiene querencia al rayo, dime, dónde duermen tus sueños recién nacidos, dónde respiran, para poder hacerles un sitio en mi utopía.