De ese sol que engaña
Publicado: Jue, 26 Ene 2017 10:34
De ese sol que engaña.
Envuelve entre sus rayos el intenso frío,
pero hasta la tarde,
no se templa,
permitiendo la eterna primavera
donde en enero
florecen los garbanzos
y el alma esponja de sus alegrías.
Pero en las horas del frío
todo es oscuro,
grave, sumergido
en los originales disfraces del miedo,
de la poesía sin enigmas,
en la súplica despiadada y carente de libertades.
Por fin,
se encaminan los verdes maduros y consientes;
apoyo siempre.
Cuánto egoísta,
el hambre y el frío,
vacíos de consuelo
o de abrigo,
carentes de respuestas,
de ternuras de esos momentos
que ya no existen.
Y si suplió rezo,
busco en mi fe
el refugio,
el reclamó para la lucha verdadera,
sin trabas,
solo con Dios, mis amigos y mis ángeles.
Envuelve entre sus rayos el intenso frío,
pero hasta la tarde,
no se templa,
permitiendo la eterna primavera
donde en enero
florecen los garbanzos
y el alma esponja de sus alegrías.
Pero en las horas del frío
todo es oscuro,
grave, sumergido
en los originales disfraces del miedo,
de la poesía sin enigmas,
en la súplica despiadada y carente de libertades.
Por fin,
se encaminan los verdes maduros y consientes;
apoyo siempre.
Cuánto egoísta,
el hambre y el frío,
vacíos de consuelo
o de abrigo,
carentes de respuestas,
de ternuras de esos momentos
que ya no existen.
Y si suplió rezo,
busco en mi fe
el refugio,
el reclamó para la lucha verdadera,
sin trabas,
solo con Dios, mis amigos y mis ángeles.