Muchas gracias Jose Manuel. Un fuerte abrazo.jose manuel saiz escribió:Luis, mi más sincera enhorabuena por el galardón conseguido.
Un fuerte abrazo.
J. Manuel
La infinita inutilidad del discurso (V)-
Moderadores: J. J. Martínez Ferreiro, Rafel Calle
Re: La infinita inutilidad del discurso
- Rosa Marzal
- Mensajes: 3902
- Registrado: Jue, 02 May 2013 20:05
- Ubicación: España
- Contactar:
Re: La infinita inutilidad del discurso
Mi sincera enhorabuena, Luis.
Abrazos.
-
- Mensajes: 29847
- Registrado: Mié, 09 Abr 2008 10:21
Re: La infinita inutilidad del discurso
Besos
Pilar
- J. J. Martínez Ferreiro
- Mensajes: 14215
- Registrado: Lun, 19 Nov 2007 13:27
- Ubicación: Santiago de Compostela
Re: La infinita inutilidad del discurso
Un abrazo, Luis.
-
- Mensajes: 1246
- Registrado: Mié, 26 Oct 2016 7:18
- Ubicación: Orense
Re: La infinita inutilidad del discurso
Luis Muñiz M. escribió:Si la vida enseña algo, sin duda es a callar.
Un día solo resisten unas cuantas palabras
huecas brotando de nuestra boca
sin esfuerzo ni excesivo entusiasmo:
¿Cómo te va?, bien gracias, ¿que le debo?
si, no, adiós, no sé, me duele, ¿qué hora es?
yo también...
Y entonces llega el momento crucial, inaplazable,
de detener la función,
de parar el tiempo,
de rebobinar este jodido e indescifrable film.
Y es como si volviéramos otra vez
a mirar dentro de aquella agujereada caja
de zapatos
donde guardábamos de niños
aquellos gusanos, lentos y blandengues,
entrañablemente suaves y glotones;
como engordaban, como crecían, y luego
como tejían y se envolvían en su habitáculo de seda
de hermosos colores pastel...
para resurgir como blancas y despistadas mariposas,
(o más bien feuchas polillas).
Y como copulaban, y llenaban
la caja de diminutos huevecillos. Después morían
y vuelta a empezar.
El ciclo mágico de la vida, la belleza y la muerte.
Sin odas ni cortinas.
Tu dedicación hacía esos frágiles seres
al recoger cada pocos días las hojas frescas
de morera. Ellos no te pedían nada, ni te daban
las gracias. No era necesario. Tú tampoco
les pedías nada. Tú solo les observabas y alimentabas.
Defendías su ciudad de indeseables intrusos.
Limpiabas su cuadriforme hogar
al volver del colegio, y antes de acostarte.
Ellos te mostraban toda su vida.
Dócilmente se dejaban manipular,
recorrían tu dedo y tu mano
sin ningún miedo, como si la rama de su árbol.
Acto supremo de armonía
y simbiosis entre dos especies
tan diferentes y tan cercanas..
Y entonces, sin saber muy bien por qué,
empiezas a pensar que:
tal vez por eso que el beso acapara los labios
y las lenguas,
los sueños son al dormir
y la nieve no avisa.
Y por eso que las estrellas crecen en el desierto,
la lágrima sobrevive al viento y al rayo,
la guitarra hace vibrar al hueso
(y el fuego muere por su mala boca).
...Y que quizás el amor es un capullo de seda.
Y la verdad: el torpe aleteo de una mariposa
que no puede volar
tras una vieja caja de zapatos
en el silente planeta de un niño...
_________________________
Estoy aquiiiiiiiiiii (leer con voz de cacofonía)
ya estoy seria.
Muchas felicidades porque este poema merece estar destacado.
Besito señor Luis.
Antonia Mauro.
- Alejandro Costa
- Mensajes: 4607
- Registrado: Dom, 13 Mar 2016 18:27
Re: La infinita inutilidad del discurso
Espectacular.
Un abrazo.
me perdono la vida cada día.…
Me sobra el corazón (Miguel Hernández)
Re: La infinita inutilidad del discurso
Muchas gracias querida amiga. Abrazos.Rosa Marzal escribió:Un gran poema, que sin duda, merece ser reconocido.
Mi sincera enhorabuena, Luis.
Abrazos.
Re: La infinita inutilidad del discurso
Muchas gracias, Pilar. Besos amiga.Pilar Morte escribió:Felicidades, Luis, sin duda un poema que merece galardón.
Besos
Pilar
Re: La infinita inutilidad del discurso
Muchas gracias, Ferreiro. Un abrazo amigo.J. J. M. Ferreiro escribió:ENHORABUENA por este merecido reconocimiento a tan magnífico poema.
Un abrazo, Luis.
Re: La infinita inutilidad del discurso
Ya te oiiiiiiiií, jeje. Muchas gracias Toñita. Un besito, compi.elena morado escribió:Luis Muñiz M. escribió:Si la vida enseña algo, sin duda es a callar.
Un día solo resisten unas cuantas palabras
huecas brotando de nuestra boca
sin esfuerzo ni excesivo entusiasmo:
¿Cómo te va?, bien gracias, ¿que le debo?
si, no, adiós, no sé, me duele, ¿qué hora es?
yo también...
Y entonces llega el momento crucial, inaplazable,
de detener la función,
de parar el tiempo,
de rebobinar este jodido e indescifrable film.
Y es como si volviéramos otra vez
a mirar dentro de aquella agujereada caja
de zapatos
donde guardábamos de niños
aquellos gusanos, lentos y blandengues,
entrañablemente suaves y glotones;
como engordaban, como crecían, y luego
como tejían y se envolvían en su habitáculo de seda
de hermosos colores pastel...
para resurgir como blancas y despistadas mariposas,
(o más bien feuchas polillas).
Y como copulaban, y llenaban
la caja de diminutos huevecillos. Después morían
y vuelta a empezar.
El ciclo mágico de la vida, la belleza y la muerte.
Sin odas ni cortinas.
Tu dedicación hacía esos frágiles seres
al recoger cada pocos días las hojas frescas
de morera. Ellos no te pedían nada, ni te daban
las gracias. No era necesario. Tú tampoco
les pedías nada. Tú solo les observabas y alimentabas.
Defendías su ciudad de indeseables intrusos.
Limpiabas su cuadriforme hogar
al volver del colegio, y antes de acostarte.
Ellos te mostraban toda su vida.
Dócilmente se dejaban manipular,
recorrían tu dedo y tu mano
sin ningún miedo, como si la rama de su árbol.
Acto supremo de armonía
y simbiosis entre dos especies
tan diferentes y tan cercanas..
Y entonces, sin saber muy bien por qué,
empiezas a pensar que:
tal vez por eso que el beso acapara los labios
y las lenguas,
los sueños son al dormir
y la nieve no avisa.
Y por eso que las estrellas crecen en el desierto,
la lágrima sobrevive al viento y al rayo,
la guitarra hace vibrar al hueso
(y el fuego muere por su mala boca).
...Y que quizás el amor es un capullo de seda.
Y la verdad: el torpe aleteo de una mariposa
que no puede volar
tras una vieja caja de zapatos
en el silente planeta de un niño...
_________________________
Estoy aquiiiiiiiiiii (leer con voz de cacofonía)
ya estoy seria.
Muchas felicidades porque este poema merece estar destacado.
Besito señor Luis.
Re: La infinita inutilidad del discurso
Muchas gracias, Alejandro. Un fuerte abrazo.Alejandro Costa escribió:La vida bajo un escrito.
Espectacular.
Un abrazo.
- Manuel Alonso
- Mensajes: 6585
- Registrado: Jue, 09 Ene 2014 2:09
- Ubicación: León, España
Re: La infinita inutilidad del discurso
- Ventura Morón
- Mensajes: 5418
- Registrado: Mar, 29 Oct 2013 0:40
Re: La infinita inutilidad del discurso
Un fuerte abrazo
-
- Mensajes: 12222
- Registrado: Sab, 29 Dic 2007 14:18
- Ubicación: España - Bilbao
- Contactar:
Re: La infinita inutilidad del discurso
Muy bien seleccionado el poema como poema de la semana.
Abrazos para ti, poeta
Ana
http://www.laberintodelluvia.com
- José Manuel F. Febles
- Mensajes: 7184
- Registrado: Dom, 09 Dic 2007 15:45
- Ubicación: Sta. Cruz de Tenerife
Re: La infinita inutilidad del discurso
José Manuel F. Febles
Nietzsche.