Editorial Alaire

Cabalgas, silencio,
a lomos de una bestia solitaria,
coronas mi temblor, señalas
mi cicatriz de pájaro vencido.
No,
no afines en mi oído
tu violín de suicidios,
tu incontable álgebra de aludes.

Tus dedos no pueden abarcar
mi cuello de amapola;
ya mi voz es murmullo quedo entre ríos de lumbre:
secó el trigo negro de la infancia en mis huesos
pero todavía no es tiempo de siega,
sino del blanco sideral, del gris asceta, del músculo cantor.

Deja que amarillee lentamente la sien
del otoño, que ablande su cordura
con saliva de esperas.
Reposará mi sangre en el opio de las Parcas
mientras castigue el sol de agosto los tejados
de un diciembre proscrito,
intuido en la piel de la ceniza.

Creo encontrarme ante un poema impecable, de suave armonía, intenso y lírico, lleno de atinadas imágenes y con metáforas oportunas. Me ha gustado, también, ser el primero en decírtelo. Un abrazo.
Salud.

Rosa Marzal escribió:Cabalgas, silencio,
a lomos de una bestia solitaria,
coronas mi temblor, señalas
mi cicatriz de pájaro vencido.
No,
no afines en mi oído
tu violín de suicidios,
tu incontable álgebra de aludes.

Tus dedos no pueden abarcar
mi cuello de amapola;
ya mi voz es murmullo quedo entre ríos de lumbre:
secó el trigo negro de la infancia en mis huesos
pero todavía no es tiempo de siega,
sino del blanco sideral, del gris asceta, del músculo cantor.

Deja que amarillee lentamente la sien
del otoño, que ablande su cordura
con saliva de esperas.
Reposará mi sangre en el opio de las Parcas
mientras castigue el sol de agosto los tejados
de un diciembre proscrito,
intuido en la piel de la ceniza.

Excelente, bello poema, Rosa. Te felicito por su inmaculado lirismo. ERA

Qué bién escribes, Rosa, no me canso de decírtelo.
Un poema hermosísimo, muy logrado en ritmo y expresión lírica. Me ha encantado. Felicidades
Besos
Pilar

Enhorabuena, Rosa, sin duda es un poema inmenso con imágenes potentes, me ha gustado mucho.

Un abrazo.

Excelente poema, Rosa, con imágenes muy logradas. Felicidades y un abrazo.

Siempre veremos a las Parcas rondando y esperando, pero lo que me maravilla es el concierto de imágenes preciosas
y esa exuberancia metafórica que recorre los surcos del campo con buenas versos de poesía.

un abrazo

Muy hermoso poema de Rosa.

Coincido con los compañeros, Rosa. Sin duda es un gran poema.

Casi se pueden palpar las imágenes y sentir el temblor del silencio entre tus versos resilentes.

Un placer leerte, y gracias por compartirlo.

Un abrazo, amiga.

Vibrante y colmado de sensibilidad querida amiga...conmueve leerte...
Siempre grato leerte...te abrazo con todo mi cariño...
Nancy

Rosa Marzal escribió:Cabalgas, silencio,
a lomos de una bestia solitaria,
coronas mi temblor, señalas
mi cicatriz de pájaro vencido.
No,
no afines en mi oído
tu violín de suicidios,
tu incontable álgebra de aludes.

Tus dedos no pueden abarcar
mi cuello de amapola;
ya mi voz es murmullo quedo entre ríos de lumbre:
secó el trigo negro de la infancia en mis huesos
pero todavía no es tiempo de siega,
sino del blanco sideral, del gris asceta, del músculo cantor.

Deja que amarillee lentamente la sien
del otoño, que ablande su cordura
con saliva de esperas.
Reposará mi sangre en el opio de las Parcas
mientras castigue el sol de agosto los tejados
de un diciembre proscrito,
intuido en la piel de la ceniza.

Extraordinario poema

manejo y calidad, ante todo


Un abrazo fuerte, querida amiga

Un poema magnífico de ritmo impecable, con un gran poder de trasmisión. Un lujazo leerte,
Un abrazo.
Pepa

Un poema precioso, Rosa. Es una delicia leerte siempre.
Un abrazo.

Me ha encantado el poema, querida Amiga. Muchos abrazos.

¡Touché!

Mi abrazo estremecido.