Editorial Alaire

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espléndido cierre, Pedro, para un poema que muestra la versatilidad de esa parte de nosotros, que obedece a nuestra voluntad en cada instante

un abrazo..........Pilar

Muchas gracias por tus palabras, el alma está en la mano, siempre en la mano. Un abrazo fuerte.

pedro arguedas ibáñez escribió:Muchas gracias por tus palabras, el alma está en la mano, siempre en la mano. Un abrazo fuerte.

Totalmente cierto Pedro. El ojo mira, pero la mano llega. La mirada te puede engañar, pero cuando te estrecha la "mano de pez", no cabe engaño.
Muy bueno.
Un abrazo.




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Imposible permenecer ajena a esta mano Pedro, siempre le he dado una gran importancia a las manos, a su significados, desde luego que tú has ampliado los horizontes hasta ´donde la poesía puede mirar y sobrevolar cualquier razón:

Esta mano que siembra en los espejos la semilla de un fuego dividido en dos ojos.
Esta mano metida en el viento para azotar la carne de quien sólo para su tacto vive.

Por destacar algo, me encanta entero.

Un abrazo

Sara

La mano es la voz de los poetas Pedro, la que vadea hielos y azota carnes. La mano física tiene cinco dedos, la mano poética todas las palabras por delante. Las dos sueñan el tacto y acarician o arañan, o laceran, o desgarran, o son de terciopelo o de guijarros.

La mano es el salvoconducto de los amables y el instrumento de los irascibles, como la voz, como los poemas.

Iterativa forma poética de reflexión de manos en la vida y en la muerte. Como la voz poética.

Profunda reflexión la que nos dejas.

Un abrazo.

Santiago Redondo Vega

pedro arguedas ibáñez,

Magnífico estilo, amigo mío
se siente la calidad de tu pluma

Un abrazo fuerte

Un abrazo, para ti, o mejor, un buen apretón de manos ígneas. Gracias, Gran Jefe.