Que ingenuidad la mía,por escribir con falta de caligrafía.Que cuando estoy de espalda no entiendolo que otro dice.Que cuando voy defrente no veolo que va en mi espalda.Como el ojo que necesita el espejopara mirarse la cara.Así el espejo quenecesita el ojopara mirarse la paja.Pero se juntan en el mismo puntopara encontrar la mirada.Y los dos con el dibujo ajeno,por el mismo frente sin mostrar la espalda.Que ingenuidad la mía,sin buscar la sombra por donde pasa la luz.El sol cuando se vuelve día.Cuando se vuelve tierra la noche.Quién sabe lo que detrás del mundo,sin pensamiento de hombre,con tantas tinieblas, imágenes de fantoche,sin que se le pueda decir un nombre,y por mi falta de caligrafía,por el dibujo del broche,formado por dos cabezas:-el que escribe y el que leecon la misma letra.Como si fuera posible leersin escribir…y viceversa.Aunque quiera usted y yo,con autouficiencia,encontrarnos a solas con la poesía.En el espejo con la rareza.Será posible vernos las caras,(como el que escribe y el que lee)con la misma letra.1/17/14O. Llombart.
