jose junco escribió:EL REGRESO
A todos los que el odio les segó la vida.
Del óxido y la herrumbre del desprecio surgen para abrigar las noches frías voces que se revuelven en lo oscuro, manos con la pasión entre los dedos, vértebras que sintieron el cuchillo del odio en un asalto de animales y ahora se robustecen con el humus y claman por la espalda que les toca.
Vuelven también borrándose la sangre labios para besar las comisuras en los rincones de los marginados, allí donde hacen costra los olvidos y crecen flores no catalogadas y hierbabuena en los torcidos gestos.
Retornan del silencio las pasiones, se enrocan en el aire y luego exhalan de un viejo amor los pálpitos y el ritmo cuando del brazo van por los senderos apenas cuando crece un nuevo día pugnando con estrellas rezagadas y el canto primoroso de los mirlos.
Otra vez a la vida que un quebranto con artes de traición les quitó un día. Del mar las caracolas lo celebran como un pañuelo azul que coge alturas para encontrarse con las ramas verdes de unos ojos que brillan y se alegran haciendo el eco de un silencio largo.
Hermoso poema, amigo José, donde, de nuevo, apuestas por eliminar la pausa versal, en otra solemne manifestación alegórica de las evoluciones que palpitan en los biorritmos y sus disquisiciones de por vida.
Ciertamente, tus trabajos me interesan mucho, además de una gran facilidad para decir sin decires rimbombantes, con una familiaridad semántica de gran altura literaria, tu gran pasión por la métrica te conduce a investigarla, luego viene desnaturalizarla.
Como has comentado en otro sitio, lo propio es partir del conocimiento para conocer… O quizá, si vienes de conocer, sería mejor decir reconocer; se reconoce que la estructura métrica clásica de los versos, no es importante a la hora de leerlos. Entonces, ¿para qué sirve la métrica clásica? Iremos hablando de ello; como es natural, el ritmo, la concepción rítmica del verso, también se ven profundamente afectados.
Tal y como lo has planteado, el poema debe recitarse con mucho mimo -la falta de signos de puntuación en los primeros versículos de las dos primeras estrofas, etc.-. Efectivamente, si en cualquier poema es necesario leer o recitar con sumo cuidado –mucha corrección-, en el que nos ocupa se hace más necesario; eso es algo muy corriente entre los grandes precursores de lo que llaman verso libre (eliminando detenciones, obligaban a una lectura muy atenta y personificada, por el riesgo de cambiar el sentido de lo dicho), que, como se puede observar en tu poema, de libre tiene poco, o, mejor, absolutamente nada.
Se da el caso de que si este poema no se lee dividiendo los periodos sintácticos en 11 sílabas, no podremos saber lo que nos quiere decir el autor, o sea, estaremos leyendo otra cosa. Ahí se demuestra que la métrica tiene algo que ver, pero también se demuestra que, hoy en día, la concepción métrica parte, tiene que partir, partirá de otros esquemas conceptuales. Ni mejores, ni peores, diferentes, actualizados.
Por otra parte, según la colocación que decidieras (al ser versos bien estructurados se pueden colocar de todas las maneras que admite el mundo de los poemas), se podría discutir que fuese verso libre, pero, en el formato que nos presentas no se puede discutir que sea un poema en prosa, por la sencilla razón de que has eliminado los dos conceptos del verso, cómputo silábico y pausa versal, convirtiendo tus endecasílabos en versículos. Si no hay verso hay prosa, poética pero prosa; es así de fácil.
Como es obvio, si tu poema en prosa lo colocáramos a la manera clásica, es decir, lo dividiéramos en versos endecasílabos, o sea, renglones afectados por la pausa versal, es decir, versos en vez de versículos, no sería perentorio que se tuviera que leer con sumo cuidado, ya que la propia colocación de los versos, coincidiendo el periodo sintáctico con la pausa versal, facilitaría mucho la lectura o el recitado, aun admitiendo los encabalgamientos, sin objeciones.
¿Sabes? estoy llegando a ciertas conclusiones sobre la concepción rítmica del verso. Si te digo que la propia definición del verso no me parece acertada, no te diré más, podrías tomarme por demente, jajaja. Es cierto, me estoy cuestionando los cimientos conceptuales de la versificación. Pienso que se han quedado obsoletos. Partiendo de que elimino todas las licencias versales en beneficio del lenguaje, culto, por supuesto, porque creo que la poesía es cultura, fundamentalmente, primordialmente cultura. Luego viene los demás.
En fin, colega, ha sido un placer leerte. Felicidades por el poema y por lo que significan tus trabajos como gran aportación al mundo del poema.
Un cordial abrazo.