Paisaje

[Javier Dicenzo]

Paisaje



“ Ahora el cine es solo un sueño”

Cinema Paradiso

Se ve desde la ventana de la casa junto al río un deambular de pájaros, los ojos del anciano capturan cada trazo del paisaje. Hay gotas que caen como lágrimas entre los remansos de las aguas. El anciano clava lamirada en un punto del firmamento, ve un arco iris; Y unos ojos en el horizonte, la romántica paz de las nubes.Junto a la ventana llueven gotas de un rocío,el anciano llora ya que en ese paisaje ve el pasado, sus lágrimas caen despacio. El lugar es muy bello, tanto como sus antiguos amores de juventud. Su mente comienza adesvariar, por eso junto al río ve unos fantasmas girar sobre sus talones, son tresfantasmas, uno con forma de mujer y los otros dos son niños. Ellos juegan , aparecen ydesaparecen junto a una bruma traslucida. En el paisaje se ven los pájaros,hermosos colibríes junto a las flores del río donde los caballos salvajes se acercan abeber. Esos tres fantasmas miran al anciano, y con unos espejos le hacen giños. Elanciano ríe, también llora, sus recuerdos vagan en esos fantasmas del pasado. ¿ Que he hecho? Piensa el, ¿ Esos son mis recuerdos ?, los recuerdos de un instanteprecioso, mis hijos mi mujer. El pasado le juega algo siniestro, ve junto alrío caminar esas figuras y junto a él demonios escondidos, ve manos y unos ojosazules que devoran
los peces luminosos.Comienza a llover muy fuerte, como si la naturaleza conspirara contra laventana. La lluvia moja los pastos y a los caballos,también la ventana, un frío fluye por ella y de pronto, se abre y entra un aire intenso el viejo la cierra con escasas fuerzas. Luego aparece un sol brillante, el paisaje se vuelve agreste, hermoso, la luz ilumina el horizonte. Aparecen unos perrosque van cazando peces y los traen a tierra. Pero en un instante la noche empieza a cubrir con su sombra el lugar, elviejo ve como la luna roja como la sangre pura acecha la bastedad del campo. Ve de apoco los seres fantasmales, esos fantasmas chapotear entre la neblina, luego dosbúhos aparecen, son búhos blancos que acechan a los ratones. Los caballos estándormidos. Y muy despacio, ve como unos lobos irrumpen, sus ojos son intensos y un silbido remarca el suspenso de la luna roja. Se ve como los fantasmas van hacia el monte, se escuchan gritos mortales, luego aparece una sombra unasombra inmensa sobre el agua del río, titilan las luces y un grito ensordecedor sesiente, caen manchas de sangre sobre la ventana y el anciano cierra sus ojos,lamenta eso. Luego todo silencio, y ve como las figuras aparecen, como los niños van caminando por la costa y esa mujer, ve, recuerda que es una imagen conocida,el anciano intenta ver sus rostros pero no los ve, sus ojos no adivinan la imagen distorsionada en ellos,como si el mismo olvido se llevara esas caras, y un eco lejano conmueve las paredes dela casa. Los búhos vuelan sobre el río , el paisaje vuelve a estar calmo. El anciano mira la luna y esta se vuelve blanca, cae nieve, y ve como los perros acechan una presa en el agua. Los fantasmas cruzan laisla y se pierden dejando una estela a su paso.El anciano recuerda esosdías de juventud, cuando amaba a su mujer y a sus niños pero eso es parte ya del olvido, lo que ve en elfirmamento es la ventana de la vida, esa ventana le muestra ese paisaje, un eterno ventanal hacia el pasado, y entonces escucha una voz.-! “Pedro, olvida tu pasado, no mires por la ventana, olvida tu pasado”!-.Pedro con sus manos temblorosas toca el vidrio, un fuego le recorre por la piel. Ve los rayos y una tormenta apocalíptica frentea el, y miles de alas de pájaros, -¡ “Pedro olvida tu pasado, olvida no mires por la ventana”!-.El anciano bebe un trago de vino, toma su saco y cierra las cortinas. Baja por el corredor y vahacia planta baja de la casa.Camina hacia el arroyo todo esta silencioso y comienza a ponerse nervioso, siente como si siempre hubieraestado allí, entonces se da cuenta que alguien lo esta observando, como si Diosmismo o el destino jugara con él.Camina hacia el agua, ve los peces, ve los tres fantasmas correr, a su mujer y a los niños, los caballos se espantan, los búhosvuelan lejos y siente algo en su espalda, y escucha una voz: -“No mires- no por favor nomires hacia atrás-No puede soportar esa voz ,da media vuelta y ve con horror su casa, a un hombre en la ventanaclavándole en la vista, como si fuera él ese sujeto. La figura desaparece, pedro vuelve asu casa, rastrea su habitación pero no encuentra nada,solamente ve unas huellasen el vidrio. Frente a él divisa como los fantasmas se funden en el paisaje junto a las aguas, y cierra la ventana.




JAVIER DICENZO

[Javier Dicenzo]

NOTA. SEPAN DISCULPAR LA ESTRUCTURACIÓN DEL TEXTO YA QUE NO PUDE EDITARLO BIEN

[Borja Martínez]

Me ha gustado tu relato, Javier. Ha sido una lectura muy placentera. Un saludo cordial.

[Javier Dicenzo]

Borja gracias por tu paso estoy dandole un tratamiento especial a los trabajos