Editorial Alaire

Hay siglos sin vientre, fósiles de un acaso lunar,
dentaduras en el ovillo de la música que fue eco
de un osario. Tengo en la piel mil vértebras de alud,
tengo el palacio de rotundas elipses que nació dibujo
en el iris o quizá lo nombró. Tú navegas en caballos
escarlata y yo pregunto por la red o por el rostro joven
de un náufrago que no tuvo estío. Llegan los turistas
con la flores caídas y un paso de arcángel que trasnocha
o miente. Busco el aire como un racimo que se aleja,
busco los collares que maldicen el signo, igual
que los pentagramas cuando atosigan su fe. Hoy
será un sueño lo que no dice la noche. En el rumor
de los puentes, en sus vestidos de anfibio y alelí
yo escucho leyendas que no han nacido aún, caracolas
que se excitan como novicias en celo, destruidos mundos
sin oasis, el licor suave de la amatista y el párpado noble
del dolor. Nadie escribe sobre la piel del sol su destino.
Nadie.

Ramón Carballal escribió:Hay siglos sin vientre, fósiles de un acaso lunar,
dentaduras en el ovillo de la música que fue eco
de un osario. Tengo en la piel mil vértebras de alud,
tengo el palacio de rotundas elipses que nació dibujo
en el iris o quizá lo nombró. Tú navegas en caballos
escarlata y yo pregunto por la red o por el rostro joven
de un náufrago que no tuvo estío. Llegan los turistas
con la flores caídas y un paso de arcángel que trasnocha
o miente. Busco el aire como un racimo que se aleja,
busco los collares que maldicen el signo, igual
que los pentagramas cuando atosigan su fe. Hoy
será un sueño lo que no dice la noche. En el rumor
de los puentes, en sus vestidos de anfibio y alelí
yo escucho leyendas que no han nacido aún, caracolas
que se excitan como novicias en celo, destruidos mundos
sin oasis, el licor suave de la amatista y el párpado noble
del dolor. Nadie escribe sobre la piel del sol su destino.
Nadie.

Un texto fascinante e imposible de olvidar. El último verso me impactó mucho; hay tantísimos caminos y algunos son por sí mismos transitorios y advenedizos...otros llevan un sello de roca firme, un musitar de patria dérmica.

Enhorabuena y ovación sostenida, Ramón.

Un abrazo fuerte,

Hallie

"Nadie escribe sobre la piel del sol su destino.
Nadie."

Ramón, qué fiesta de imágenes! Debería resaltar todo el poema.

Besos y mi admiración de siempre.

Un digno remate para tanta hermosura metafórica. Me gustó.
Saludos.

Tus poemas son para quedarse meditando en cada verso, por eso me gustan. Un placer
Abrazos
Pilar

Hallie Hernández Alfaro escribió:

Ramón Carballal escribió:Hay siglos sin vientre, fósiles de un acaso lunar,
dentaduras en el ovillo de la música que fue eco
de un osario. Tengo en la piel mil vértebras de alud,
tengo el palacio de rotundas elipses que nació dibujo
en el iris o quizá lo nombró. Tú navegas en caballos
escarlata y yo pregunto por la red o por el rostro joven
de un náufrago que no tuvo estío. Llegan los turistas
con la flores caídas y un paso de arcángel que trasnocha
o miente. Busco el aire como un racimo que se aleja,
busco los collares que maldicen el signo, igual
que los pentagramas cuando atosigan su fe. Hoy
será un sueño lo que no dice la noche. En el rumor
de los puentes, en sus vestidos de anfibio y alelí
yo escucho leyendas que no han nacido aún, caracolas
que se excitan como novicias en celo, destruidos mundos
sin oasis, el licor suave de la amatista y el párpado noble
del dolor. Nadie escribe sobre la piel del sol su destino.
Nadie.

Un texto fascinante e imposible de olvidar. El último verso me impactó mucho; hay tantísimos caminos y algunos son por sí mismos transitorios y advenedizos...otros llevan un sello de roca firme, un musitar de patria dérmica.

Enhorabuena y ovación sostenida, Ramón.

Un abrazo fuerte,

Hallie

Muchas gracias por tu generoso comentario, Hallie. Un fuerte abrazo.

Como es habitual, amigo Ramón, el poema es una sucesión de imágenes novedosas e impactantes que dejan un sabor a buena poesía. Los encabalgamientos, más numerosos que de costumbre, otorgan al recitado un continuo sobresalto melódico.
Ha sido un placer leerte. Felicidades por este muy hermoso poema.
Un fuerte abrazo.

El último verso es un digno epílogo a un hermoso poema, un gusto leerte, Ramón.
SALUDOS.

yo escucho leyendas que no han nacido aún

Tu poesía marca futuro,conjugas la belleza del verso con la fuerza
y eso es poderío.
siempre te leo y encuentro algo muy significativo


abrazos Ramón

lázaro

Hola Ramón.
Como siempre una bella cascada de imágenes y metáforas en un texto que puede antojarse prosa poética pero que tiene toda la hermosura de los mejores versos.
Un placer leerte, amigo mío.
Mario.

Excelente trabajo, mis felicitaciones!!! Un abrazo cordial, Eduardo.

Nadie escribe sobre la piel del sol su destino.
Nadie.

Qué poema maravilloso!
Fascinante el último verso!
Bellísimas imágenes!
Un beso, querido Ramón
Maria Lua

Metido de lleno en el hacer sentir desde el surrealismo, me llega este poema, Ramón, como un aluvión luctuoso, de figuras que me incitan hacia un desastre por imaginar. No conozco bien los mecanismos que me impelen a este estado de amargor en las palabras y sin embargo me dejo llevar por este desbordamiento de imágenes que intento descifrar casi inútilmente.

Ni que decir que me ha gustado su obra, Ramón y le quedo agradecido por ello.

Saludos.

Busco el aire como un racimo que se aleja, busco los collares que maldicen el signo, igual que los pentagramas cuando atosigan su fe.


Para enmarcar, Ramón. Me lo copio; será la piel del sol cuando peregrine a mi destino.



Unha aperta forte, poeta.
Manuel

Ramón Carballal,

Imagen, lenguaje , poesía: belleza

te felicito


Un abrazo fuerte