Urgencias

[Mario Martínez]

Gracias Óscar, por dejarme tu amable respuesta. Un abrazo, compañero.
Mario.

[Mario Martínez]

Desde luego, uno como los que tu escribes, está al alcance de muy pocos.

Gracias Pablo. Siempre tan amable con mis versos.
Lo cierto es que es posíble que tenga una predisposición al endecasíalabo, porque me salen con más facilidad que otros metros...o quizá sea porque como he hecho tantos, ya les tengo cogida la medida y nunca mejor dicho.
Un abrazo, compañero.
Mario.

[Ernesto Vecilla]

De mi último poemario, "Navegando silencios"


Urgencias


En tu boca febril busco caminos
que a través de colinas de tersura
desciendan por tu piel, dulce tortura,
al cielo de tus muslos repentinos.

Me detengo en tu vientre; peregrinos,
son mis labios a flor de tu cintura
recorriendo sedosa la espesura
donde late el mejor de los destinos.

Aupado a tu sentir penetro ansioso
el templo de tu carne palpitante
en mutuo batallar acompasado.

La urgencia se enardece; flash gozoso
sacude nuestras prisas un instante,
y el tiempo queda inmóvil, derrotado.




Mario

Leo con gozo tu soneto, Mario.
Observo en él más palabra que eco, más legado que herencia, más vivencia que experiencia lectora y más arte, en fin, que artificio, lo que no es poco. Y aplaudo que la finalidad creadora, que creo apreciar en él, no sea propiamente el soneto, sino que nos propones un "poema en forma de soneto". Por eso, los rigores de la forma se diluyen en la palabra y dejan de tener importancia. No obstante y en este sentido, echo de menos en el soneto una mayor variedad rítmica del endecasílabo, ya que no has elegido el monorritmo puro en la composición, por otra parte demasiado vetusto y en desuso. Esa variedad es francamente exigua en el segundo cuarteto y en ambos tercetos. Los antirritmos de los versos primero y tercero del primer cuarteto “se notan al oído”, pero ¿restan perfección al verso cuando están tan profusamente extendidos y admitidos entre los clásicos? También me gustaría preguntarte si consideras imprescindible la coma al final del primer verso del segundo cuarteto.
Ha sido un placer detenerme en tu hermoso trabajo.
Recibe un afectuoso saludo.
Ernesto

[Mario Martínez]

Gracias Nesthor.
Si esa "afección" de la que hablas supone un remover de emociones interiores, me doy totalmente por satisfecho, compañero. Un fuerte abrazo.
Mario.

[Mario Martínez]

Hola Ernesto.

Leo con gozo tu soneto, Mario.
Observo en él más palabra que eco, más legado que herencia, más vivencia que experiencia lectora y más arte, en fin, que artificio, lo que no es poco. Y aplaudo que la finalidad creadora, que creo apreciar en él, no sea propiamente el soneto, sino que nos propones un "poema en forma de soneto". Por eso, los rigores de la forma se diluyen en la palabra y dejan de tener importancia. No obstante y en este sentido, echo de menos en el soneto una mayor variedad rítmica del endecasílabo, ya que no has elegido el monorritmo puro en la composición, por otra parte demasiado vetusto y en desuso. Esa variedad es francamente exigua en el segundo cuarteto y en ambos tercetos. Los antirritmos de los versos primero y tercero del primer cuarteto “se notan al oído”, pero ¿restan perfección al verso cuando están tan profusamente extendidos y admitidos entre los clásicos? También me gustaría preguntarte si consideras imprescindible la coma al final del primer verso del segundo cuarteto.
Ha sido un placer detenerme en tu hermoso trabajo.

Agradecerte en primer lugar, compañero, esa didáctica disección que has efectuado a mi soneto, y alegrarme de que te haya gustado.
Creo que en el principio de tu comentario has dado en el clavo en todas tus apreciaciones (quizá en lo de la experiencia lectora fuese la cosa a medias, ya que en principio no tuve demasiada, aunque ya sí de unos años a esta parte).
Tienes razón también en que mis sonetos (y son muchos los escritos), pueden estar escritos en forma de poema( aunque claro, a esa conclusión no puede llegarse con un sólo soneto). Esa, y que me gusta más la musicalidad que la forma, pueden que sean las razones de la falta de variedad rímica en este soneto. O quizá, también, que en mis poemas, sean sonetos o no, lo que prima siempre es la sencillez y el que me gusté contar cosas y que se entiendan, por eso, a veces, con endecasílabos heróicos, melódicos y algún enfático o sáfico de vez en cuando tengo suficiente para conseguir el ritmo pretendido. En fin, que no soy de mucha variedad en ese sentido. Tampoco me gusta el exceso de metáforas, sobre todo aquellas totalmente inentelingibles. Siempre he sido un clásico.
Según en que sonetos y en que poemas, los antirritmos no los desprecio, en ocasiones aportan un plus de musicalidad siempre que no "raspen" demasiado.
Sí que creo que esa coma al final del primer verso del segundo cuarteto, es necesaria, y lo es como pausa y comprensión de lo que son "mis labios" en su vientre y más allá. Intenta leerlo todo seguido y llegarás al final del cuarteto casi con sofoco (más sofoco, quiero decir, jeje).
En fin, que me alegra que te haya gustado, compañero y espero haber dispado un poco tus dudas. Un abrazo.

Mario.

[Mario Martínez]

Gracias Nesthor, y disculpa por haber respondido a Ernesto antes que a ti, solo fue por unas apreciaciones suyas. Un abrazo.
Mario.