Duda

[Josefa A. Sánchez]

Gracias, Guillermo, por tu amable visita y comentario. A mi si que me gustaría escribir como tu.
Un abrazo.
Pepa

[Josefa A. Sánchez]

Gracias, Pilar, por tu generosidad siempre. La verdad es que intento escribir con naturalidad y a así sale, plagadito de defectos.
Un abrazo.
Pepa

[Josefa A. Sánchez]

Gracias, Ana, por el tiempo invertido en tu análisis, del que he aprendido mucho y por decir que te ha gustado.
Un abrazo.
Pepa

[Josefa A. Sánchez]

Gracias, Ricardo José, por pasar y comentar.
Un abrazo.
Pepa

[Josefa A. Sánchez]

Gracias, Juan Pablo, por detenerte en mis letras y sacar de ellas algo de tu gusto. Lo de la perfección está bastante lejos, pero gracias.
Un abrazo.
Pepa

[Josefa A. Sánchez]

Gracias, Lázaro, por tus amables palabras. Me alegra mucho verte por aquí.
Un abrazo.
Pepa

[Josefa A. Sánchez]

Gracias, Marius, por venir y dejar tu generosa huella en mis versos.
Un abrazo.
Pepa

[Josefa A. Sánchez]

Gracias, Roberto, por tus amables palabras. No se si es mas triste la fe ciega o la duda razonada.
Un abrazo.
Pepa

[E. R. Aristy]

.


Mientras tú vives en la luz más clara
yo moro en las tinieblas indecisas.
Mientras tú te alimentas de sonrisas
es un valle de lágrimas mi cara.

Una distancia inmensa nos separa
a ti y a mí, tus pausas y mis prisas.
Yo preciso tocar y tú precisas
el verbo que consuela y que repara.

Este dudar de todo, desespera
y en mi condenación no espero ayuda
que otorgue una certeza, pero sé

que entre la oscuridad de mi ceguera
es tan valioso un gramo de mi duda
como una tonelada de tu fe.



Pepa







(Editado para corregir erratas y solventar algún fallo.)

la duda nos salva de ser credulos, la fe incuestionable es ciega. En todo se debe consultar y que nada quede sin procesar en sano juicio. Pepa admiro y respeto tus grandes talentos. He aqui otra de tus excelsas obras. Un beso, ERA

[Julio Gonzalez Alonso]

.


Mientras tú vives en la luz más clara
yo moro en las tinieblas indecisas.
Mientras tú te alimentas de sonrisas
es un valle de lágrimas mi cara.

Una distancia inmensa nos separa
a ti y a mí, tus pausas y mis prisas.
Yo preciso tocar y tú precisas
el verbo que consuela y que repara.

Este dudar de todo, desespera
y en mi condenación no espero ayuda
que otorgue una certeza, pero sé

que entre la oscuridad de mi ceguera
es tan valioso un gramo de mi duda
como una tonelada de tu fe.



Pepa




(Editado para corregir erratas y solventar algún fallo.)

¡Fantástico, fantástico, amiga Pepa! Es imprescindible leerte y quedarse con tus sonetos para aprender a valorar esta estrofa e intentar aprender. Todo el tema está desarrollado con una coherencia exquisita y una belleza fuera de toda duda; para rematar, nos dejas ese encabalgamiento soberbio entre el último verso del primer terceto y el primero del segundo que nos lleva en volandas a un cierre rotundo y redondo. Muchas felicitaciones. Con un abrazo.
Salud.

[Josefa A. Sánchez]

Gracias, F. Enrique, por detenerte en estos versos sin muchas pretensiones y decidir que merecen la pena.
Un abrazo.
Pepa

[Josefa A. Sánchez]

Gracias, Vitor, por tu generosidad y el interés que pones en mis cosas y gracias por intentar corregir mi incorregible obstinación.
Un abrazo.
Pepa

[Josefa A. Sánchez]

Gracias, Era, por la generosidad que demuestras al venir y dejar tu amable comentario.
Un abrazo.
Pepa