Lillian Hernández escribió:"No sé por qué en mi interior hay claridad de soles,
caricias de sonrisas en campos de primaveras,
espirales de sueños en los ojos abiertos,
por qué soy feliz. La alondra canta
y respiro por la herida de los años.
Amanece, y el día me mira con envidia."
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Julio, a mí también me encantó tu poema
y, como el día, también te tengo envidia...
Cariños.
Lillian
Creo que entendiendo esta alegría la envidia no tiene cabida, amiga Lillian. Muchísimas gracias por tu amable comentario.
Salud.