Esclavos de la razón...

[Jorge Salvador]

A veces la razón no encuentra explicaciones
y se inventa respuestas para salir del paso;
ella, tan dada a razonarlo todo,
jamás aceptará que existen los milagros
por más que, cual las meigas,
bien sabe que haberlos, haylos.

La razón, si por algo es la madre de la ciencia,
es porque razonando encuentra siempre
una razón de peso que pese más que la duda.

Su lema es: “no te angusties,
yo te daré la solución de todo;
olvídate del cuento ese de Dios omnipotente
y déjame las riendas de tu vida.”

La razón es soberbia, vanidosa,
prepotente, locuaz, desaprensiva
y helada como un témpano de hielo;
piensa que el corazón es un zumbado
que se niega a aceptar las evidencias
por falta de intelecto.

Cuando atrapa a los hombres,
los convierte en esclavos del sistema;
luego les roba el don del albedrío
y les interna en la locura completamente cuerdos,
en libertad constantemente vigilada…

[Luis M]

A veces la razón no encuentra explicaciones, sí, pero sin apoyarnos en ella volveríamos a la Edad Media, o a un mundo gobernado por Trumps, Bolsonaros o Miguel Bosés... Yo, personalmente me quedo con la "soberbia, vanidosa, prepotente, locuaz, desaprensiva y helada" razón, antes que con los caprichosos e impulsivos mandatos del corazón (que por cierto nunca se caracterizó por su sentido común y racionalidad).
Ciertamente a veces hay que soñar, imaginar y recurrir a la fe, pero la razón (la buena razón) también contempla esos verbos y su necesidad.
Aun estando en desacuerdo con el mensaje de tu poema, siempre es un verdadero placer leerte, Ramón. Un fuerte abrazo amigo.

[Pilar Morte]

Creo que dejarse llevar, a veces, del corazón o de la intuición es dar en la diana. Hallar equilibrio es casi acertar. Me gustaron tus reflexiones,
Abrazos

[E. R. Aristy]

A veces la razón no encuentra explicaciones
y se inventa respuestas para salir del paso;
ella, tan dada a razonarlo todo,
jamás aceptará que existen los milagros
por más que, cual las meigas,
bien sabe que haberlos, haylos.

La razón, si por algo es la madre de la ciencia,
es porque razonando encuentra siempre
una razón de peso que pese más que la duda.

Su lema es: “no te angusties,
yo te daré la solución de todo;
olvídate del cuento ese de Dios omnipotente
y déjame las riendas de tu vida.”

La razón es soberbia, vanidosa,
prepotente, locuaz, desaprensiva
y helada como un témpano de hielo;
piensa que el corazón es un zumbado
que se niega a aceptar las evidencias
por falta de intelecto.

Cuando atrapa a los hombres,
los convierte en esclavos del sistema;
luego les roba el don del albedrío
y les interna en la locura completamente cuerdos,
en libertad constantemente vigilada…

Es un poema fuerte para muchos que no se detienen a investigar la filosofía. Pero antes que toda Filosofía, el ser humano buscó explicar su encuentro con otros y con la naturaleza, y con lo desconocido en términos teológicos. Es un poema difícil pero muy bello en defensa de lo inexplicable de la realidad suprema. En la lógica hay una serie de premisas falsas, mientras que en la ilógica, es decir el vortex, el caos, el ojo de la tormenta, en ese estado de experimiento, el pensamiento generativo aperhende el extasis que nos cuesta mucho poner en palabras. Hay mucho error en todas las cosas, incluyendo en la Teología que decidió utilizar lenguaje filosófico. Thomas Aquinas y Agustín son dos ejemplos del uso de la razón en sus tratados. Para mi tu poema es vital para la postura de quien está abierto a la inefabilidad de Dios y quien si negar el uso importante de la razón, encuentra el milagro de la iluminación. Un abrazo grande, Jorge Salvador. ERA

[Jorge Salvador]

A veces la razón no encuentra explicaciones, sí, pero sin apoyarnos en ella volveríamos a la Edad Media, o a un mundo gobernado por Trumps, Bolsonaros o Miguel Bosés... Yo, personalmente me quedo con la "soberbia, vanidosa, prepotente, locuaz, desaprensiva y helada" razón, antes que con los caprichosos e impulsivos mandatos del corazón (que por cierto nunca se caracterizó por su sentido común y racionalidad).
Ciertamente a veces hay que soñar, imaginar y recurrir a la fe, pero la razón (la buena razón) también contempla esos verbos y su necesidad.
Aun estando en desacuerdo con el mensaje de tu poema, siempre es un verdadero placer leerte, Ramón. Un fuerte abrazo amigo.

Bueno, Luis, parece que nuestras desavenencias ideológicas van a más (risas).
Sí, ciertamente el mundo ha cambiado radicalmente desde que no está Trump, las vacunas nos curaran a todos y España volverá a ser el paraíso de sol y fandango que siempre fue. Dios no es más que un recurso desesperado cuando la ciencia no puede hacer nada por nosotros... sí, eso es lo que hay, y todo lo que se oponga a eso... negacionismo.
No desprecies a tu corazón, te aseguro que sirve para mucho más que para mantenerte con vida.
Gracias, amigo, se te quiere a pesar de las discrepancias. Un gran abrazo

[Jorge Salvador]

Creo que dejarse llevar, a veces, del corazón o de la intuición es dar en la diana. Hallar equilibrio es casi acertar. Me gustaron tus reflexiones,
Abrazos

Por supuesto que sí, Pilar. El corazón siempre acaba venciendo a la razón (cuando se le da la oportunidad).
Gracias por pasarte, querida amiga.
Abrazos

[Jorge Salvador]

A veces la razón no encuentra explicaciones
y se inventa respuestas para salir del paso;
ella, tan dada a razonarlo todo,
jamás aceptará que existen los milagros
por más que, cual las meigas,
bien sabe que haberlos, haylos.

La razón, si por algo es la madre de la ciencia,
es porque razonando encuentra siempre
una razón de peso que pese más que la duda.

Su lema es: “no te angusties,
yo te daré la solución de todo;
olvídate del cuento ese de Dios omnipotente
y déjame las riendas de tu vida.”

La razón es soberbia, vanidosa,
prepotente, locuaz, desaprensiva
y helada como un témpano de hielo;
piensa que el corazón es un zumbado
que se niega a aceptar las evidencias
por falta de intelecto.

Cuando atrapa a los hombres,
los convierte en esclavos del sistema;
luego les roba el don del albedrío
y les interna en la locura completamente cuerdos,
en libertad constantemente vigilada…

Es un poema fuerte para muchos que no se detienen a investigar la filosofía. Pero antes que toda Filosofía, el ser humano buscó explicar su encuentro con otros y con la naturaleza, y con lo desconocido en términos teológicos. Es un poema difícil pero muy bello en defensa de lo inexplicable de la realidad suprema. En la lógica hay una serie de premisas falsas, mientras que en la ilógica, es decir el vortex, el caos, el ojo de la tormenta, en ese estado de experimiento, el pensamiento generativo aperhende el extasis que nos cuesta mucho poner en palabras. Hay mucho error en todas las cosas, incluyendo en la Teología que decidió utilizar lenguaje filosófico. Thomas Aquinas y Agustín son dos ejemplos del uso de la razón en sus tratados. Para mi tu poema es vital para la postura de quien está abierto a la inefabilidad de Dios y quien si negar el uso importante de la razón, encuentra el milagro de la iluminación. Un abrazo grande, Jorge Salvador. ERA

Muchas gracias por tu extraordinario alegato en defensa de este poema que has captado en toda su magnitud, querida Era. Está bien claro que, a más mente y razón, menos corazón. Pero los mundos internos, eso que llaman Dios, jamás serán accesibles a aquellos que desconfían de cualquier cosa que escape a los dictados de su mente. La mente es fría, calculadora, inflexible, enemiga absoluta de la intuición, a la que niega por pura ignorancia.
Un verdadero placer, amiga. Otro gran abrazo

[Rafel Calle]

interesante trabajo, amigo Jorge.
Felicidades.
Abrazos.

[Armilo Brotón]

Ahí andamos estimado Ramón, buscando un equilibrio entre la una y el otro.
Un toque de atención oportuno son tus versos.
Un abrazo y salud

[Jorge Salvador]

interesante trabajo, amigo Jorge.
Felicidades.
Abrazos.

Muy amable, Rafel.
Gracias. Un abrazo

[Jorge Salvador]

Ahí andamos estimado Ramón, buscando un equilibrio entre la una y el otro.
Un toque de atención oportuno son tus versos.
Un abrazo y salud

Difícil es el equilibrio, Armilo, pero como bien dices, ahí andamos todos en el intento, que el que la sigue la consigue.
Gracias por pasarte, un abrazo