Editorial Alaire

Si en este instante
el pájaro que alea engarzado a su enigma
fuera el signo visible en las alturas
de un tiempo suspendido,

y el azar, con su dedo de humo,
me hubiera señalado para ungirme
con la fugaz inflorescencia
de la mujer desconocida que ahora me sonríe
al cruzarse conmigo por el parque;

si ese volcán de luz
hallara en mí su meta,
y se hiciera verdad este breve infinito
en la puesta de sol sobre ese rostro
que germina, incendiado, en mi mirada de repente,

qué limpio al fin el abandono
del agua del aljibe en el misterio del latir,
qué afirmación, atrás, en el camino,
qué calmada esta espera ante la muerte.

Felipe Fuentes García escribió:Si en este instante
el pájaro que alea engarzado a su enigma
fuera el signo visible en las alturas
de un tiempo suspendido,

y el azar, con su dedo de humo,
me hubiera señalado para ungirme
con la fugaz inflorescencia
de la mujer desconocida que ahora me sonríe
al cruzarse conmigo por el parque;

si ese volcán de luz
hallara en mí su meta,
y se hiciera verdad este breve infinito
en la puesta de sol sobre ese rostro
que germina, incendiado, en mi mirada de repente,

qué limpio al fin el abandono
del agua del aljibe en el misterio del latir,
qué afirmación, atrás, en el camino,
qué calmada esta espera ante la muerte.

Sentido, hermoso, urgente.
Ese condicional que obliga a las hipótesis, ese condicional que declina en los párpados.

Me ha gustado mucho, Felipe.

Abrazo y sinceras felicitaciones.

Felipe Fuentes García escribió:Si en este instante
el pájaro que alea engarzado a su enigma
fuera el signo visible en las alturas
de un tiempo suspendido,

y el azar, con su dedo de humo,
me hubiera señalado para ungirme
con la fugaz inflorescencia
de la mujer desconocida que ahora me sonríe
al cruzarse conmigo por el parque;

si ese volcán de luz
hallara en mí su meta,
y se hiciera verdad este breve infinito
en la puesta de sol sobre ese rostro
que germina, incendiado, en mi mirada de repente,

.

Maravillosas hipótesis con ese final plácido que emana del poema.

"qué limpio al fin el abandono
del agua del aljibe en el misterio del latir,
qué afirmación, atrás, en el camino,
qué calmada esta espera ante la muerte"

Límpidos y exquisitos versos.
Abrazos

Hermoso trabajo, amigo Felipe.
Abrazos.

Si ese volcán de luz
hallara en mí su meta

En eso estamos. amigo,. Un hermoso y dicente poema. Un placer leerte.
Abrazos
Pilar

Un poema rotundo, lleno de sabiduría existencial. La mujer como bálsamo ante la vejez y la muerte. Estoy de acuerdo y me emociona que escribas sobre un tema que siempre me ha obsesionado. El ritmo, como siempre, impecable; el lenguaje, sobrio, aliñado. Tus poemas son fuentes de inspiración. Albricias.

Un saludo con empatía.
Óscar

Felipe Fuentes García escribió:Si en este instante
el pájaro que alea engarzado a su enigma
fuera el signo visible en las alturas
de un tiempo suspendido,

y el azar, con su dedo de humo,
me hubiera señalado para ungirme
con la fugaz inflorescencia
de la mujer desconocida que ahora me sonríe
al cruzarse conmigo por el parque;

si ese volcán de luz
hallara en mí su meta,
y se hiciera verdad este breve infinito
en la puesta de sol sobre ese rostro
que germina, incendiado, en mi mirada de repente,

qué limpio al fin el abandono
del agua del aljibe en el misterio del latir,
qué afirmación, atrás, en el camino,
qué calmada esta espera ante la muerte.

Wow! Esplendoroso poema, Felipe. Es un viaje sensorial y latente que se arrima y hace realidad la comunión de las miradas que coinciden. Me maravillas, poeta. Un abrazo grande, ERA

Felipe,

otro magnífico poema, amigo, de tu inagotable cosecha. Me gusta la manera sabia como el poema va discurriendo todo él en proposiciones condicionales: si... si... si... sin una sola mayúscula que rompa con el mantra del pensamiento especulativo. Me gusta mucho el detalle de la mujer en el parque, aporta naturalidad en tu contexto habitual de alta intensidad lírica.

Me gusta mucho, como siempre.

Abrazos.