Editorial Alaire

La sola latitud, el cuerpo a cuerpo
sin fondo de la ausencia. Un mar se afana
en extender sus sábanas de espuma
sobre la sílice de bronce, el amaranto
que urde el rescoldo de los médanos.
Gime el sol fugitivo en esta hora
como el naufragio de una voz herida.
Es el susurro añil con que se amasa
la mansedumbre del yacer
en el ocre tenaz del abandono. Estoy
anudando gavillas con la sombra
que apura en su cosecha de cántaro vacío
el eco de mis ciervos abrasados.
Territorio de límites, aquí rumia un himno
la altivez primigenia de la piedra
bajo el oro del ámbar de la luz abatida.
He venido a este enclave, vagabundo,
aquietando las aguas con mis manos,
y un murmullo de espigas en los ojos
se desmorona, vertical, hacia lo oscuro:
cae el fulgor tardío como lluvia o llanto
sobre mi corazón en esta espera
en que todo se afirma en su deshacimiento
de duna trashumante,
donde atardezco como alud de escarcha
que ya no azuza la marea inmóvil,
porque nada me habita en este olvido
de aliento solitario, porque
–bruma azarosa en la quietud salina–
llamé a todas las puertas, y no estabas.

Triste poema, con un lirismo que atrapa desde el primer verso.
Felicidades y mis deseos de Año Nuevo con salud y paz.
Besos
Pilar

Felipe Fuentes García escribió:La sola latitud, el cuerpo a cuerpo
sin fondo de la ausencia. Un mar se afana
en extender sus sábanas de espuma
sobre la sílice de bronce, el amaranto
que urde el rescoldo de los médanos.
Gime el sol fugitivo en esta hora
como el naufragio de una voz herida.
Es el susurro añil con que se amasa
la mansedumbre del yacer
en el ocre tenaz del abandono. Estoy
anudando gavillas con la sombra
que apura en su cosecha de cántaro vacío
el eco de mis ciervos abrasados.
Territorio de límites, aquí rumia un himno
la altivez primigenia de la piedra
bajo el oro del ámbar de la luz abatida.
He venido a este enclave, vagabundo,
aquietando las aguas con mis manos,
y un murmullo de espigas en los ojos
se desmorona, vertical, hacia lo oscuro:
cae el fulgor tardío como lluvia o llanto
sobre mi corazón en esta espera
en que todo se afirma en su deshacimiento
de duna trashumante,
donde atardezco como alud de escarcha
que ya no azuza la marea inmóvil,
porque nada me habita en este olvido
de aliento solitario, porque
–bruma azarosa en la quietud salina–
llamé a todas las puertas, y no estabas.

Hermoso y lleno de fuerza expresiva, amigo.
Una se queda cautiva en su encanto.

Aplausos sonoros y mil felicitaciones con los mejores deseos para el nuevo año.

Felipe Fuentes García escribió:La sola latitud, el cuerpo a cuerpo
sin fondo de la ausencia. Un mar se afana
en extender sus sábanas de espuma
sobre la sílice de bronce, el amaranto
que urde el rescoldo de los médanos.
Gime el sol fugitivo en esta hora
como el naufragio de una voz herida.
Es el susurro añil con que se amasa
la mansedumbre del yacer
en el ocre tenaz del abandono. Estoy
anudando gavillas con la sombra
que apura en su cosecha de cántaro vacío
el eco de mis ciervos abrasados.
Territorio de límites, aquí rumia un himno
la altivez primigenia de la piedra
bajo el oro del ámbar de la luz abatida.
He venido a este enclave, vagabundo,
aquietando las aguas con mis manos,
y un murmullo de espigas en los ojos
se desmorona, vertical, hacia lo oscuro:
cae el fulgor tardío como lluvia o llanto
sobre mi corazón en esta espera
en que todo se afirma en su deshacimiento
de duna trashumante,
donde atardezco como alud de escarcha
que ya no azuza la marea inmóvil,
porque nada me habita en este olvido
de aliento solitario, porque
–bruma azarosa en la quietud salina–
llamé a todas las puertas, y no estabas.

Que despliegue de belleza! Sin duda, Felipe, tuya es la Lira! Abrazos, ERA

Inmenso poema, compañero del alma. Cada palabra es un pensamiento, una punzada que duele hasta el último verso que cierra el poema, lleno de lirismo que apasiona.

Felicidad para este año que tan bellamente comienzas.

Desde mi isla, un fuerte abrazo.

José Manuel F. Febles

Joooo:

Qué bonito, Felipe

Un lenguaje poético excepcional, un ritmo contenido y un final espectacular.

De pie para los aplausos
Felicidad en este año nuevo que comienza
Ana

Felipe.

como siempre, calidad y buen hacer en tus letras plenas de aciertos líricos. La obra de un poeta de verdad.

Un abrazo y feliz año.

Me encanto el tono del poema y la fuerza conque se mueven las fo4mas que empleaste, amigo.

Un abrazo y feliz 2019

Un polimétrico hermoso, evocador, interesante, digno de tu factoría, amigo Felipe.
Abrazos.