Editorial Alaire

Qué nos niega y azuza sin piedad para que no seamos,
y quién convino luego la mansedumbre a cambio
de un oscuro latir en el varal ciego del día,
de recoger acaso unas migajas caídas del amor.

Alguien prendió la sangre sobre el sueño
de la gloria arbolando la bandera
de una felicidad que nunca poseímos.

Porque nada es más hondo que nuestra propia inexistencia,
más firme y duradero que nuestro halo de fugacidad.

Un inclemente soplo esconde el fluir que nos empuja
lejos del manantial donde surgimos, arrastrándonos hoy
sobre el solar deshacimiento del esplendor como testigo
de una de tantas fulguraciones de la muerte.

El tránsito, la voz que nos pronuncia. Y en su derrota,
como un clamor de todo hacia la niebla,
la nave del arduo amanecer sangriento de la luz.

Belleza, sabiduría y pulcritud, Felipe.

Felicitaciones sinceras.

Un abrazo.

Muy hermoso, Felipe. Enhorabuena.

Un abrazo.

Hay inteligencia y buen hacer. Felicidades.
Besos
Pilar

Felipe Fuentes García escribió:Qué nos niega y azuza sin piedad para que no seamos,
y quién convino luego la mansedumbre a cambio
de un oscuro latir en el varal ciego del día,
de recoger acaso unas migajas caídas del amor.

Alguien prendió la sangre sobre el sueño
de la gloria arbolando la bandera
de una felicidad que nunca poseímos.

Porque nada es más hondo que nuestra propia inexistencia,
más firme y duradero que nuestro halo de fugacidad.

Un inclemente soplo esconde el fluir que nos empuja
lejos del manantial donde surgimos, arrastrándonos hoy
sobre el solar deshacimiento del esplendor como testigo
de una de tantas fulguraciones de la muerte.

El tránsito, la voz que nos pronuncia. Y en su derrota,
como un clamor de todo hacia la niebla,
la nave del arduo amanecer sangriento de la luz.

Todo el poema encuentra sus resonancias con La Belleza. En particular, me conmueven estos versos: Porque nada es más hondo que nuestra propia inexistencia,
más firme y duradero que nuestro halo de fugacidad.
Mis respetos, Felipe. ERA

Mi admiración por la sabiduría con que nos ofrece unos versos que, integran un poema, verdaderamente inmenso. Felicidades, querido Felipe, una vez más por la riqueza de tus palabras.

Desde mi isla, un fuerte abrazo.

José Manuel F. Febles

Preciosa, precisa y mágica inspi¡raciçpon, Amigo. porque si "nadie es más hondo que nuestro propia inexistencia" andamos todos
en un paralelismo muerto y profundamente inexistente. Ya veremos... si alguien es capaz de anularnos la ceguera.

Un abrazo

Felipe,

magnífico poema, amigo. Como siempre, calidad y hondura en tus letras. A mí me gusta mucho.

Un abrazo.

Hermoso e interesante trabajo, amigo Felipe.
Abrazos.

"El tránsito, la voz que nos pronuncia. Y en su derrota,
como un clamor de todo hacia la niebla,
la nave del arduo amanecer sangriento de la luz".


... eres sin duda alguna un auténtico e incansable buscador de la luz y su porqué, hermano y paisano Felipe; y dejo esos tres versos porque estimo que recogen con tan grata fuerza y necesidad poética, lo que acabo de decir más arriba; comprobémoslo, pues. Un saludo fraterno y felices días para tí y para todos los compañeros del Foro, cómo no, cómo no. a. justel

Hallie Hernández Alfaro escribió:Belleza, sabiduría y pulcritud, Felipe.

Felicitaciones sinceras.

Un abrazo.

Muchas gracias, Hallie, por tu paso por el poema.
Muy amable con tu comentario.
Gracias también por tus felicitaciones.

Recibe un abrazo.
Felipe.

C.P. Fernández escribió:Muy hermoso, Felipe. Enhorabuena.

Un abrazo.

Muchas gracias, C. P., por tu felicitación.

Un abrazo.
Felipe.

Demoledoramente cierto, impecable alianza entre palabra y pensamiento
en beneficio de una elevada estética que no hace concesión a la razón pura.
Bravo! Un abrazo.