Sin ti...

[E. R. Aristy]

Una herida sin ti se me agiganta,
tu ausencia arrasa toda sembradura
y es el orto el envés de nieve oscura
de un pájaro de luz que ya no canta.

Oye mi pecho. Sobre mi garganta
desboca el corazón su queja pura;
lejos de ti no hay sombra ni espesura
con tanta niebla ni con noche tanta.

Muda es mi voz si tu mirar es vano,
desértico, mi ser de parte a parte,
y humo si tú no estás, todo mi fuego.

Vente, amor, hasta mí, dame tu mano,
que pueda retenerte y cobijarte,
¡no te vayas a ir, que quedo ciego!

Esplendoroso soneto, Felipe! Un gran placer leerte, amigo poeta. ERA

[Felipe Fuentes García]

Muy bello trabajo, amigo Felipe.
Abrazos.

Te agradezco tu paso por el poema, Rafel.

Un gran abrazo, amigo.
Felipe.

[Mirta Elena Tessio]

Una herida sin ti se me agiganta,
tu ausencia arrasa toda sembradura
y es el orto el envés de nieve oscura
de un pájaro de luz que ya no canta.

Oye mi pecho. Sobre mi garganta
desboca el corazón su queja pura;
lejos de ti no hay sombra ni espesura
con tanta niebla ni con noche tanta.

Muda es mi voz si tu mirar es vano,
desértico, mi ser de parte a parte,
y humo si tú no estás, todo mi fuego.

Vente, amor, hasta mí, dame tu mano,
que pueda retenerte y cobijarte,
¡no te vayas a ir, que quedo ciego!

Excelente soneto amoroso, me me ha gustado leer, y creo que compartimos otro portal, del que ya me he ido.
Saludos cordiales. Admiramos al mismo poeta sonetista de esos lares.