Editorial Alaire

Dejad la piedra en blanco
porque ya no hacen falta las palabras.
Porque sé,
como sabéis vosotros,
que sólo somos carne de silencio.

Se borrarán las fechas,
se volverán vacíos nuestros nombres
y quedarán las piedras
anónimas y limpias
sobre un paisaje libre de inútiles recuerdos.

Dejad la piedra en blanco.
Que la lluvia del tiempo y la maleza
escriban sabiamente el epitafio
a la más engreída de todas las especies.

Magnífico poema, Celia, dicente, sin artificios y con un sentido real en versos hermosos. Felicidades
Abrazos
Pilar

Muy hermoso y recio tu poema, fuerte y valiente; "dejad la piedra en blanco".
Un abrazo

Magnífico poema, Celia, con un final espectacular.

Felicitaciones
Un beso grande
Ana

Excelente poema Celia, cuyo final es,sencillamente estremecedor. Mis felicitaciones sinceras.

Un abrazo desde mi isla.

José Manuel F. Febles

Fabuloso poema. Impactante y con un acertado remate.

Mi felicitación.

Un abrazo.

Es magnífico, simplemente maravilloso, siempre me llego a esta ventana para encontrar POESÏA.
Me gusta mucho leerte, Celia, siempre me voy con las manos llenas.

Un abrazo grande.

Carmen

Precioso Celia. Precioso y trascendente. La muerte, la piedra, el epitafio, la naturaleza, la reflexión sobre la engreída condición humana. Todo ellos resumido en unos pocos y bellos versos, muy condensados, tratados con mimo y maestría.

Un abrazo grande, amiga.

HAS pintado aquí el fin del mundo humano. Caerá todo y caeremos sin remedio.
El poema limpio y triste... y muy dotado.

un abrazo

¡Qué magnífica claridad para este epitafio! Celia, escribes muy bien, ya lo sabes, aunque no te prodigas demasiado. Poemas así hacen a uno creer en en la poesía.
Con un abrazo decembrino.
Salud.

El tiempo ha de darnos la medida de lo que realmente somos: "carne de silencio". Magnífica y lúcida reflexión sobre la vanidad humana.

Mis aplausos, Celia.

Un abrazo.

Me uno a los compañeros para felicitar esta obra puntual, elegante y decididamente evocadora.

Abrazo grande, Celia.

Muchas gracias, Pilar, siempre tan amable y generosa.
Muy agradecida por tu presencia, Xaime. Celebro que te gustara.
Ana, muchas gracias por tus palabras.

Abrazos.

Muchas gracias, José Manuel, por tus siempre amables palabras.
Muy agradecida, Ramón, eres muy amble.
Carmen, una alegría verte en mis cosas. Muchas gracias.

Me gusta el simbolismo de tus letras, reales y sabias.
Un placer leerte, Celia.
Abrazo