Pobre cuerpo

[Ventura Morón]

Me ha gustado mucho Pablo, como afrontas el tema, como lo vas deshilvanando con estos versos largos, con este ritmo que vas imprimiendo, la manera de acentuar.

Me ha encantado esta idea de compartir el audio, es valiente y lleno de ganas. ¡Bravo!
Fuerte abrazo

[Rosa Marzal]

Consigues hacernos llegar esa fragilidad del cuerpo-espíritu del hombre en esta magnífica entrega.

Muy logrado, Pablo. Felicidades.

Un abrazo.

[Pablo Ibáñez]

Gracias Raúl, Gerardo, Ventura, Rosa.

Es un auténtico honor para mí vuestro paso por mis cosas.

Un abrazo, amigos.

[Manuel Alonso]

Pobre cuerpo, eso digo yo, me ha gustado mucho, amigo, un placer y un abrazo.

[Marius Gabureanu]

Pablo, un gran poema, amigo. Pobre cuerpo nos pone en frente un espejo verdadero en el que se refleja un descuido existencial. El cuerpo del poema no es pobre, hay riqueza léxica, metáforas profundas, y esa forma de escribir que te caracteriza, donde hay que tener en cuenta todas las palabras y los signos, porque tienen su importancia. Tú construyes poesía todoterreno. Abrazos.

[Rafel Calle]

Los mejores poemas de Pablo Ibáñez en Alaire.

[xaime oroza carballo]

De todas maneras, pobre cuerpo...
por ti, codicia, alma, lo que seas: afán nocturnal de maltratarlo.
La cuota de fruición ya goteando, pobre cuerpo, y sigues, ¡por tu alma!, borriquillo
desvainado de trotar con otros cuerpos.

Pobre cuerpo: apenas una brizna de claror moja la estancia
¡allá se van tus ojos a horadarla!,
a clavar sus agujas en tu sien emborrachada por el alma,
a dejarse abonar en el dolor, ¡y cómo duelen!
los cartílagos de estar siempre acechantes,
los cinturones de grasa fermentados, las hueseras
cariadas de etanol y decepciones.

Pobre cuerpo, error de la inexistencia;
trasiegas corazón sin esperanza y basta un buche
de belleza casual para que rompa a hervir toda tu savia. Basta el sueño
de dar paso a un eternal tu sacrificio
para que duermas tranquilo como un niño.

De todas maneras, pobre…
pobre cuerpo.


Audio:

Grande el canto que se desenvuelve, mágico y agridulce hasta el final. Un placer, su lectura.
Abrazos.