Moderadores: J. J. Martínez Ferreiro, Rafel Calle
Quinteño de Greda escribió:Fíjate si era verdad, que esto me ha salido tras la lectura del poema...
Un abrazo.
!Ay!, en tus líricas franjas
naranjas
del "lucernario cuaderno"
de invierno,
y el don del fruto dorado
amado
versos de azahar brotado
para besar a unos labios
con lujuria y sin agravios
naranjas de invierno amado...
La mesa se convierte en lujo cuando acuden comensales de tu talla, Gerardo. Gracias por tu presencia amable. Con un abrazo.Gerardo Mont escribió:Un lujo de lectura, que despierta la piel del sentimiento. Uno lee, disfruta y quiere más...Siempre, elegantemente servida tu mesa, poeta. Un gran abrazo.
Carmen López escribió:Julio, me parece una entrega muy bella, muy refrescante, sensual y altamente poética, amigo. No podría pedirle nada mejor a esta mañana.
Un abrazo.
Carmen
J. J. M. Ferreiro escribió:Sabrosas y nítidamente dulces,
estas palabras
o naranjas de amor,
que ruedan
y se encabalgan
de rama en rama
por los versos enganchadas.
Salud y mar entero
amigo Odiseo.
Julio González Alonso escribió:Las naranjas del invierno
Las últimas naranjas del invierno
agua fresca en tu boca
calendario de abrazos en tus brazos
miel caliente en los labios
y los besos,
ojos del alba.
Sabías que me iría en primavera,
que soy nieve en las cumbres
corriendo en los arroyos
y manando en fuentes de deshielos.
Te dejo, amor, las flores de mi mano
tendidas en la falda de los montes
de tus senos
y un alocado sueño de deseos
en la fértil humedad de tus entrañas.
Sabías, ay, y me amaste
y dejaste que te amara
y a la boca trajimos la lujuria
de las últimas naranjas
del invierno.
González Alonso
.
Un abrazo y las gracias por sumergirte en el foro y recuperar este poema, Óscar. Me has sorprendido. Salud.Óscar Distéfano escribió:Julio González Alonso escribió:Las naranjas del invierno
Las últimas naranjas del invierno
agua fresca en tu boca
calendario de abrazos en tus brazos
miel caliente en los labios
y los besos,
ojos del alba.
Sabías que me iría en primavera,
que soy nieve en las cumbres
corriendo en los arroyos
y manando en fuentes de deshielos.
Te dejo, amor, las flores de mi mano
tendidas en la falda de los montes
de tus senos
y un alocado sueño de deseos
en la fértil humedad de tus entrañas.
Sabías, ay, y me amaste
y dejaste que te amara
y a la boca trajimos la lujuria
de las últimas naranjas
del invierno.
González Alonso
.
Rescato este valioso poema. Me ha encantado. La alegoría se encrespa como una enredadera a la idea del amor. El mensaje es de una polisemia encantadora: canto al amor, a la vida, a la naturaleza, a la alegría de los sentidos. Un trabajo donde la imaginación ha soltado sus amarras, la imaginación de un poeta consumado. Mucha poesía se desprende de esta obra.
Un abrazo, apreciado compañero.
Óscar
Mitsy Grey escribió:Julio, tan exquisitamente hermoso, como CRUEL -el mensaje-, para la piel de mujer... ¡duele! Pero por ser tan buen poeta, se te perdona.
¡Felicidades, grande! Besos
Mitsy
Pablo Ibáñez escribió:Julio,
se me había pasado esta bocanada de aire fresco y ahora, ya avanzada la primavera, he desayunado con gusto esas últimas naranjas del invierno. Leer tu poema es casi dejar correr su ácido néctar entre los labios. Me encanta la frescura de la propuesta.
Siempre un placer leerte, amigo.
Un abrazo.
Que belleza, que dulces naranjas poéticas. Un placer leerte, Julio. ERAJulio Gonzalez Alonso escribió:Las naranjas del invierno
Las últimas naranjas del invierno
agua fresca en tu boca
calendario de abrazos en tus brazos
miel caliente en los labios
y los besos,
ojos del alba.
Sabías que me iría en primavera,
que soy nieve en las cumbres
corriendo en los arroyos
y manando en fuentes de deshielos.
Te dejo, amor, las flores de mi mano
tendidas en la falda de los montes
de tus senos
y un alocado sueño de deseos
en la fértil humedad de tus entrañas.
Sabías, ay, y me amaste
y dejaste que te amara
y a la boca trajimos la lujuria
de las últimas naranjas
del invierno.
González Alonso
.
