Editorial Alaire

La muerte te miraba todo el tiempo.
Tú eras su gran obra, racimo madurando,
cosecha que segar llegado el día.

Juntos ascendimos la colina;
ella miraba
el agua de tus ojos posada en las columnas
de humo de los barrios sobre el valle,
tu cuello prenatal, pulsante y vivo...

Inmensa, solitaria, cansada,
en sombra de poder, ella miraba
como madre: sonrisa hasta llorar y tierno orgullo
bruñendo cada célula de tu cara con arrobo.

Tus risas en la playa las oía
de repente,
en medio de su noche espaciosa de labor,
y volvía los viejos ojos blancos, como ciega,
abriendo la mandíbula de arrugas al oscuro,
cifrando cada timbre de tu voz,
el lácteo aletear de tus costillas.

Pura, eterna, inamada, absorta en vastedad,
ella miraba
como madre
tu bata de hospital, doblada y limpia,
la mota de polvo flotar sobre tu hombro en la ventana,
la gota detenida entre la luz, temblante y fría.

Tremendo poema y tremendo cuadro que pintaste con cada palabra.
Sin duda un gran poema amigo mío.
Te dejo un abrazo!!

Oh, es hermosísimo, Pablo. Los ciclos cuando nos tocan son emoción cristalina, espera, un miedo bárbaro, un tic-tac mojado de ternuras y amor, amor por todos lados...

De pie, para los aplausos, querido poeta.

Abrazos fuertes.

Esto es un poemazo, Pablo, de esos que piden estrellitas de roja tirando hacia el infinito. Amigo, me parece brillante, pura poesía. Me ha encantado y me ha conmocionado leerte.

Un abrazo fuerte.

Carmen

Sobrecogedor.

Me quedo sin aliento, Pablo.

Una barbaridad de poema que merece un reconocimiento inmediato.

Gracias por compartirlo con todos nosotros.

Abrazos y Feliz Navidad.

Jo, Pablo, qué poemazo, lleno de emoción y saber hacer. Un poema que te hace volver a él a releer y empaparte de sus versos.
Mil aplausos sin parar.
Es una pena que te prodigues tan poco, pero bueno, cuando lo haces es una perla.
Besos
Pilar

Me ha encantado este poema, la originalidad del tema, humanizar a la muerte hasta convertirla en madre, sembrar ternura donde no hay salud, hacer que no duela tanto la despedida. Unas metáforas excelentes me dicen que este poema tendrá un futuro brillante. Muchos abrazos y Feliz Navidad, Pablo.

Has dibujado una obra plena de sensibilidad, emoción y belleza. Muy buen poema, Pablo. Enhorabuena, amigo. Un abrazo.

Me ha encantado, Pablo, hay poemas que duelen, aún en su belleza, en su humanidad, los tres primeros versos nos miran a todos de frente, y hay mucha ternura implícita en los que le siguen, el cierre tan íntimo, tan punzante, hermoso, pulcro, sentido... y ese gotero que nos salva y que nos muere, lo dicho, me ha gustado mucho.

Un fuerte abrazo.

Pablo. Un poema hermoso, aun en lucha por la vida. exhibes una gran sensibilidad y lirismo en tus versos, aparte de una gran originalidad de construcción de los versos. Un saludo y feliz navidad.

Muy bueno, Pablo.

Duele, pero es así, tiempo finito. Pura, eterna, inamada, absorta en vastedad…


Buena reflexión, buen trabajo y ese ritmo bien marcado hacen que, en mi opinión, dejes aquí un gran poema.

Enhorabuena, amigo.


Víctor

Me ha gustado mucho este poema, que logra una buena convivencia entre la emoción, un ambiente especial y la buena poesía. Ha sido un gusto leerte.
Un fuerte abrazo.

Pablo, eres un maestro de este arte. Vos y la poesía se conocen, se cuentan los secretos y se aman. Yo solo miro y envidio..., jeje. Sabes que admiro tu arte, ojalá ya se vendieran tus libros... Abrazos de amigo sincero.

Gracias Antonio.

Un honor para mí tu paso y comentario.

Abrazos.

Gracias Hallie, mi amiga.

Es un placer siempre leer tus apasionados comentarios.

Un abrazo.