La tarde que te amé

[Isabel Moncayo]

Ana, lo que es un placer es tener tu apoyo en la lectura y parecer, gracias por ello, un beso.

Pilar, será que llueve mucho por estos lares, y se me ha encharcado las teclas, ahora que lo releo me parece demasiada lluvia, bueno ahí quedará.. Gracias y un beso.

Víctor, siempre aprecio mucho tus observaciones, gracias por leerme, un fuerte abrazo.

Quinteño, gracias por pasar y dejar tu amable huella, un fuerte abrazo.

Hallie, gracias por ser tan generosa en tus comentarios, eres energía pura y dulce, te mando un beso enorme.

Luis, gracias, todo un lujo saberte entre mis versos, un fuerte abrazo.

Carmen, me alegra saber que de alguna manera lo has disfrutado, tú siempre tan amable con todos los compañeros, gracias por estar, besos.

Pepa, gracias por la lectura y por lo que dices, un beso.

Pablo, sabes que últimamente los musos no me acompañan, por eso agradezco tus palabras, las sé sinceras, y valoro mucho, tanto si es para bien o si es para menos bien, siempre será así. Gracias y un fuerte abrazo.

Ramón, gracias, por pasar y dejar tu amable huella, un fuerte abrazo.

Guillermo, llueve por estos lares mucho, tú bien lo sabes, aunque este verano parece alargarse, gracias por pasar y dejar constancia, un fuerte abrazo.

Antonio, gracias por dejarme tu parecer, me alegra saber que te ha gustado, un fuerte abrazo.

[Gerardo Mont]

Vuelvo a este bellísimo poema y lo encuentro tan fresco y joven como la primera vez... Un lujo leerte, poeta. Mis abrazos de amigo.

[Isabel Moncayo]

Un bellísimo poema, que cautiva desde sus primeras letras y no mengua, sino que se hace tan grande como el sentimiento que tan poeticamente sugiere. Un gran abrazo poeta.

Vuelvo a este bellísimo poema y lo encuentro tan fresco y joven como la primera vez... Un lujo leerte, poeta. Mis abrazos de amigo.

Amigo Gerardo, quise contestar todo seguido y te salté, discúlpame, últimamente soy un desastre o serán cosas de la edad. Gracias, dos veces, por tus amables comentarios y por volver al poema con tu siempre generosa lectura para mis intentos, así he podido percatarme del despiste, un fuerte abrazo.

[Isabel Moncayo]

"Te llamé agua y viniste lloviendo"
Qué formidable comienzo para un precioso poema, Isabel. Te felicito. Ha sido un placer leerte, y saber que son tuyos estos versos.
Un fuerte abrazo.

Manuel, te pido disculpas como a Gerardo, pues te salté sin contestar, despistada que ando, mil perdones y las gracias por venir y dejar tu parecer, un fuerte abrazo.

[Marisa Peral]

Te llamé agua y viniste lloviendo,


Nos han calado arrugas en las sienes
temporales de azul y chaparrones,
así llueve la vida cuando se ama,
las cosas pequeñas, lo que duele,
y querer no morirse, no del todo,
o morir así, entre tus brazos.

Te llamé agua aquella tarde,
y hoy te digo ven, lluéveme,
aquieta este diluvio de pasiones.

*

Precioso, Isabel, una sensual declaración de amor que, como siempre que te leo, disfruto una y otra vez.
Los versos que he dejado ma parecen sublimes,
Un beso grande, amiga.

[Ricardo José Lascano]

"Te ll-amé agua en la tarde
y las bocas se bebieron los vahos
ignorantes de toda desnudez,
gota y temblor en los tejados,
aguacero en el delta de los muslos."

Isabel Moncayo.


Hermosas las imágenes Isabel, nacer desde el agua abrir un tramo de frescura en la templanza de su fibra apasionada.

Abrazo de luz.

RJL

[Isabel Moncayo]

Gracias, Marisa, es un placer contar con compañeras como tú, que le suben a una el ánimo en esto de continuar escribiendo. Besos.

Gracias, Ricardo, me alegra saber que te ha gustado este intento, me gusta ese abrazo de luz, otro enorme para ti.

[Ana Muela Sopeña]

Bellísimo, Isabel.

Me gusta mucho. Ya lo comenté, pero lo subo otra vez...

Besos
Enhorabuena
Ana

[Rafel Calle]

Muy bello poema de Isabel.

[E. R. Aristy]

Te llamé agua y viniste lloviendo,
y escribimos nuestros nombres en el tiempo.

Se llueve la tarde, te dije,
y nos amamos en silencio,
como se ama el fuego cotidiano,
tú y yo prendiendo llamas
hasta que nos cubrió la noche
para cruzarnos como un río
y hacer navegables las pisadas.

Te ll-amé agua en la tarde
y las bocas se bebieron los vahos
ignorantes de toda desnudez,
gota y temblor en los tejados,
aguacero en el delta de los muslos.

Nos han calado arrugas en las sienes
temporales de azul y chaparrones,
así llueve la vida cuando se ama,
las cosas pequeñas, lo que duele,
y querer no morirse, no del todo,
o morir así, entre tus brazos.

Te llamé agua aquella tarde,
y hoy te digo ven, lluéveme,
aquieta este diluvio de pasiones.

*

Qué delicia de aguacero! Isabel. Es un hermoso poema intimista que he disfrutado esta tarde fría y me ha calentado los huesos y el corazón. Abrazos, ERA

[F. Enrique]

Atrae tu poema por el nombre, Isabel, y después de leerlo te alegras de que haya sido así, es tan sensual y tierno, y tiene tanto de ese no saber que decir que sale a borbotones, seguiremos en esa lluvia y queriendo no morir hasta que podamos.

Excelente tupoema, un abrazo.

[Administración Alaire]

Enhorabuena, amiga Isabel, por el reconocimiento como Poema de la Semana a tu obra "La tarde que te amé".
Un cordial abrazo.

[Guillermo Cumar.]

Es menester que la poesía regara e sentimiento y surgiera un gratificante homenaje merecido. Lo llames agua. nube, temporal es indiferente. Repercute para el poeta en un diluvio de sentires y pasiones donde el devenir del río renueva la corriente
que en forma de verso se hace amor indispensable.

homenaje merecido y aplauso a tu decir poético. ya sabes que tu Asturiases un poco mía.

un abrazo

[E. R. Aristy]

Enhorabuena Isabel!!! Un fuerte abrazo, ERA

[Julio Gonzalez Alonso]

Felicitaciones, amiga Isabel. ¡Qué grato encontrar tu poema reconocido! Con un abrazo.
Salud.