Puerta de agosto

[Mario Martínez]

Hola Julio.
Abrir Agosto ha sido abrirle la puerta al bochorno, que por la mañana sabe bueno pero en cuanto se calienta no hay quien pare, jejeje.
Otro poema sencillo y encantador, compañero. Sigue abriendo puertas.
Abrazos.
Mario.

[C.P. Fernández]

Gracias por abrir de una manera tan encantadora este mes de agosto.

Un abrazo.

[Pablo Ibáñez]

Julio,

hace calor, vaya que sí. Agosto en Castilla es un horror para uno del norte. Tu poema refleja muy bien esas esquinas abrasadas de los pueblos, polvorientas de trigo amarillo, esa ausencia de aire que prodiga la siesta, el callado cuchicheo de las sombras mientras, afuera, el campo agosta y el amor espera.

Como siempre un placer tus puertas.

Y este abrazo.

[Antonio Justel]

Puerta de agosto


En el calor y el silencio
la trilla sestea,
las amapolas arden en los campos
que aviva el viento
y la tarde
se baña en sudor majando
la mies tendida,
cuando todo madura
en higos y uvas
y los meses se dibujan en los días
de cabañuelas.

En calor y silencio
la mies tendida,
el sol alto;
amapolas por los campos
y el amor
que espera.


Julio G. Alonso

... ay, Julio, amigo y es que he vivido tan intensamente todo cuanto tu espléndido poema pone de manifiesto...; te felicito muy gustosamente, amigo: un calco, una obra de arte recogiendo cada cosa cual si de una perla se tratara; saludos; Orión

[E. R. Aristy]

Me gusta mucho lo que abre en el corazón todas tus puertas. Un abrazo, ERA

[Julio Gonzalez Alonso]

Me encantan estas puertas porque siempre asoma por ellas una brisa de tierra dulce y además terminan con amor. Un placer
Abrazos
Pilar

Tierra y amor... a los que podemos añadir muchos ingredientes más, como la amistad, la camaradería, la ilusión y el trabajo. En todos ellos te encuentro siempre, Pilar, y es un verdadero placer que sea así. Con un abrazo.
Salud.

[Julio Gonzalez Alonso]

Desde Seattle, donde todo está lejos, da gusto ver la puerta, donde tan cerca se ven tus versos.

Un abrazo, Julio. Nos vemos pronto.

Víctor

Un abrazo hasta Seattle. Gracias por abrir esta puerta, Víctor. Nos vemos pronto... la promesa de la morcilla gordonesa es un gran aliciente para volar hasta La Pola de Gordón. Hasta entonces, otro abrazo.
Salud.

[Julio Gonzalez Alonso]

Hermosa expresión de tu arte Julio.


Dejo un abrazo.

RJL

Gracias siempre, Ricardo. Con un abrazo.
Salud.

[Julio Gonzalez Alonso]

Julio González Alonso, Me encanta tu decir. Este poema es una muestra más de ello. Un abrazo, poeta amigo.

Un abrazo y muchas gracias, Carlos. Eres muy amable.
Salud.

[Julio Gonzalez Alonso]

Hermosa luz se gesta en el vientre tenso de agosto.

El final me lo llevo para la esperanza.

Un gran abrazo, Julio.

Amiga Hallie, te quedo muy agradecido y me alegra que te lleves ese final que promete y que será realidad, sin duda alguna. Con un abrazo.
Salud.

[Isabel Moncayo]

Deberías hacer un calendario con tus puertas, Julio, todas ellas entrañables y a las que da gusto llamar, pues se sabe que dentro el buen hacer está servido, un placer.

Un abrazo grande.

[Julio Gonzalez Alonso]

Paisano me gusta este poema "agosteño" donde se refleja ese veraniego paisaje leonés rural. un place pasarme por tus versos

saludos

rafael

Encantado, paisano. Aunque ya no se trilla en las eras, algunos no podemos renunciar a los recuerdos de aquellos veranos.
Salud.

[Julio Gonzalez Alonso]

Hola Julio.
Abrir Agosto ha sido abrirle la puerta al bochorno, que por la mañana sabe bueno pero en cuanto se calienta no hay quien pare, jejeje.
Otro poema sencillo y encantador, compañero. Sigue abriendo puertas.
Abrazos.
Mario.

El mes de agosto es así, con sus tormentas y todo. Gracias, Mario. Seguiremos abriendo puertas. Con un abrazo.
Salud.

[Julio Gonzalez Alonso]

Gracias por abrir de una manera tan encantadora este mes de agosto.

Un abrazo.

Gracias a ti, Celia, por acompañarnos. Con un abrazo.
Salud.

[Julio Gonzalez Alonso]

Julio,

hace calor, vaya que sí. Agosto en Castilla es un horror para uno del norte. Tu poema refleja muy bien esas esquinas abrasadas de los pueblos, polvorientas de trigo amarillo, esa ausencia de aire que prodiga la siesta, el callado cuchicheo de las sombras mientras, afuera, el campo agosta y el amor espera.

Como siempre un placer tus puertas.

Y este abrazo.

Se está mejor en la costa con labrisina del mar; pero las montañas leonesas esconden parajes increibles donde las temperaturas no agobian tanto y por la noche hay que taparse para dormir. La meseta es más dura; por algo nos inventamos la palabra páramo. Aún así, cuando se lleva una temporada allí, empiezas a integrarte con el paisaje y sus extensiones, aprendes a defenderte del calor del mediodía y encontrar alivio en el frescor de las bodegas excavadas en el terreno formando cuevas, ayudados por el buen vino que se cría en ellas. En fin, que lo importante es... que el amor nos espera siempre.
Gracias con un abrazo.
Salud.