Editorial Alaire

Extraje del cajero tres centenas
cautivo de mi escasa economía.
Pensé en los deuvedés que no tendría,
en sobrios desayunos, parcas cenas.

Si fuera el masticar arte, un mecenas
haría su Virgilio de mi encía,
su Horacio de mi muela rota haría
y yo tendría aún mis arcas llenas.

Mas siendo tan vulgar, mi dentadura,
tan solo por mi sueldo tutelada,
asume la función de hiriente espuela,

asumo yo la de cabalgadura
y acato la dentaria desbandada
tras de la inmolación cruel de mi muela.

Está gracioso.
Yo acabo de soltar dos centenas.
Saludos

A ver, quien hablaba de Quevedo y Cátulo y de su capacidad para hacer humorístico un tema doloroso o cotidiano. Aquellos versos que decian en boca del insigne Don Francisco:

"...Quitarnos el dolor, quitando el diente
es quitar el dolor de la cabeza
quitando la cabeza que lo siente"

Parece que la odontología no ha avanzado tanto en los últimos cuatro siglos. ¡ Muy bueno lo tuyo, paisano!

Un abrazo.
Pepa

Muy buen trabajo poético Juan,
me encantó. Felicidades

Muy bueno, Juan, en plan irónico...

Un abrazo
Ana

Se le pueden poner pocas objeciones formales al soneto y ninguna a la gracia y dolorida expresión de sus versos. Con el gracejo de un Góngora o un Quevedo te despachas estos dolores que van de la muela al bolsillo, con toda solvencia. He disfrutado un buen rato con esta estupenda lectura.
Salud.

A ver, veamos, estimado Juan.

He oído hablar de cosas que cuestan un ojo de la cara,
mas confiésote que prima vez que cueste la dentadura... jeje.
Mucho donaire en el humor externado.
Te dejo mi cordialísimo saludo.

Me ha gustado el soneto y la ironía con que lo has tratado. Ya eres un experto, amigo Juan
Besos
Pilar

Un gran soneto de corte satírico.

Eres todo un maestro de la palabra, amigo Ramón.

Un abrazo.

Oye, Juan, muy divertido el soneto. Y con todos sus ingredientes. Unas gotas de clasicismo, un tanto de ironía. Muy bien traído lo de la espuela y la cabalgadura. Lo de los deuvedés me ha llegado al alma: yo por los míos "m a t o", como belénesteban
Un fuerte abrazo y enhurabuena por el soneto.

Esteban

Muy ingeniosos versos, Juan. Estoy de acuerdo con Julio, he disfrutado estas letras en su conjunto

Saludos

Javier

JORGE SÁNCHEZ escribió:Está gracioso.
Yo acabo de soltar dos centenas.
Saludos

Es lo que hay, amigo Jorge. Pagar mucho para perder una parte de uno, a cambio de no pagar mucho más.

Muchas gracias por tu paso y comentario.

Abrazos.

Josefa A. Sánchez escribió:A ver, quien hablaba de Quevedo y Cátulo y de su capacidad para hacer humorístico un tema doloroso o cotidiano. Aquellos versos que decian en boca del insigne Don Francisco:

"...Quitarnos el dolor, quitando el diente
es quitar el dolor de la cabeza
quitando la cabeza que lo siente"

Parece que la odontología no ha avanzado tanto en los últimos cuatro siglos. ¡ Muy bueno lo tuyo, paisano!

Un abrazo.
Pepa

Huy, huy, esos autores son palabras mayores, Pepa. Desde luego los adelantos son algo muy relativo. Muchas gracias por tu divertido y animoso comentario, paisana.

Un abrazo.

Una divertida lectura, que además se disfruta desde el talento que dibuja cualquier circunstancia con el arte de una pluma llena de magia. siempre un gusto leerte y aprender de tus trabajos. Abrazos.