Pasaste en bicicleta

[E. R. Aristy]

Pasaste en bicicleta.
Tu cuerpo de masái joven y tenso
y olor a junio entrado
talaba lentamente de mi aliento
pedazos de pulsión, latidos de cordero.

Candiles de la feria doraban a tu paso
sillín nube de azúcar, mechones almendrados,
nudillos del envés del chocolate,
pantorrillas de tarde anaranjada.

Tu amiga te llamaba por tu nombre
jugando a ser tu ama
y abriste tu sonrisa de ojos chinos
y hoyuelos asturianos
y la noria giraba en la fritanga de churros con piñatas y la tómbola
bramaba su numérico alboroto y la rumba fisgaba la costura
dorsal de tu cintura.

Después vino el amor a estropearlo
y nada fue ya igual que aquel verano.

Me alegra encontrar hoy esta joya poetica, Pablo. Hoy es el momento para mi, y he disfrutado de cada imagen pincelada, cada arabesco de la brisa de aquel unico verano. Tu poema reune toda la belleza del verano, de la juventud en el verano, de la humanidad que hiere cuando ama. Es perecto, una estampa ar todos los tiempos. Te felicito! ERA